Raúl Castro reclama ante la ONU el fin del embargo estadounidense

El presidente de Cuba aseguró, en su estreno ante la ONU, que el bloqueo ha costado a la isla más de 800 mil millones de dólares
Raúl Castro ante las Naciones Unidas
photo_camera Raúl Castro ante las Naciones Unidas

El principal obstáculo para el desarrollo económico de Cuba es, para su presidente Raúl Castro, el embargo que Estados Unidos tiene desde 1962  sobre la isla y que les ha costado, según el gobierno castrista, un total de 833.755 millones de dólares. Así lo hizo saber en su primer discurso en la ONU en donde también sostuvo que el restablecimiento de relaciones diplomáticas  entre Cuba y Estados Unidos y los cambios decretados por el presidente del país norteamericano, Barack Obama, "constituyen un importante avance".


BLOQUEO. "Sin embargo, persiste el bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba por más de medio siglo", criticó en su intervención en la cumbre sobre desarrollo que se celebra en las Naciones Unidas.

Según Castro, el bloqueo "causa daños y privaciones al pueblo cubano", afecta a otras naciones y perjudica también a las empresas y ciudadanos estadounidenses. Como cada año desde hace más de dos décadas, Cuba está impulsando en la Asamblea General de la ONU una resolución crítica con el embargo, un texto que habitualmente obtiene un respaldo mayoritario, pero que, por primera vez, podría adoptarse sin el voto en contra de EE.UU. 

Por lo de ahora, el gobierno estadounidense no ha tomado una decisión sobre cómo votará el documento en el que se pide el fin del embargo. Un paso que depende de la capacidad de Obama para conseguir el apoyo del Congreso que, hasta ahora, se ha negado a este acercamiento a Cuba. 


Tras su discurso, Castro volverá a hablar en la Asamblea General el próximo lunes, una jornada en la que coincidirá con Obama, quien llega mañana a Nueva York.

AYUDA A PAÍSES EN DESARROLLO.  El presidente de China, Xi Jinping,  anunció una ayuda inicial de 2.000 millones de dólares a los países en desarrollo para apoyarles en el objetivo de cumplir las nuevas metas contra la pobreza adoptadas en la ONU.

El mandatario chino se comprometió, además, a aliviar la deuda de los países menos desarrollados y abogó por "respetar" las elecciones que hace cada nación para avanzar hacia su desarrollo.


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