Un exconcejal de ERC denuncia haber sufrido abusos por parte de un cura

Los hechos sucedieron entre 1963 a 1965 en Vilafranca, donde el sacerdote era maestro

Ramon Xena, que fue concejal de ERC en Vilafranca entre 1987 y 2007 y presidente del Consejo Comarcal del Alt Penedès entre 2005 y 2007, ha denunciado que cuando tenía entre 8 y 9 años fue víctima de abusos sexuales por parte de un cura que hacía de maestro en la escuela San Ramón del municipio.

Los hechos sucedieron entre 1963 a 1965, explica Xena, que recuerda que el sacerdote José Pitarch le hacía tocamientos "de forma continuada", "dos o tres veces a la semana", según ha revelado a la publicación local La Fura.

El exconcejal afirma que el cura y a la vez profesor realizaba los tocamientos en la misma clase: "Me ponía derecho frente a él, me pedía que dijera la lección y me tocaba".

Xena tiene la seguridad de que los otros frailes de la escuela "lo sabían" y relata que un día pasó por delante de la habitación un cura que al verle con camiseta y calzoncillos le preguntó qué hacía allí". Cuando le contestó que le había llevado el padre Pitarch, le dijo que se vistiese y se fuese a casa corriendo.

Ramon Xena afirma que ha revelado los abusos ahora, una vez jubilado, porque considera que es bueno hacerlo público "para que la gente se dé cuenta que no estamos hablando de casos aislados".

"Nosotros venimos de un tiempo de silencio, en el que en casa te llevaban a un colegio de curas porque decían que aprenderías más, haciendo un esfuerzo tremendo para ello. Y tú callabas", ha denunciado. "A mi este silencio me llevó casi a sentirme culpable, sobre todo cuando era pequeño, y tal vez ya es hora de que se sepa. ¿Por qué tengo que soportar esta carga, cuando no soy culpable?", añadió.

Xena desconoce si el padre Josep Pitarch está vivo o muerto, y en caso de estar vivo afirma que "no tiene ninguna intención de ponerle una denuncia". No obstante, afirma que ha querido hacer público su caso para "ilustrar un hecho, el abuso de menores por parte de curas", que asegura que era "habitual en la época y un secreto a voces".