3-0. El Atlético encarrila la eliminatoria con comodidad

O centrocampista do Atlético de Madrid, Saúl Ñíguez, celebra o seu gol fronte ao Lokomotiv de Moscova. JUANJO MARTÍN (EFE)

El Lokomotiv planteó una telaraña defensiva que mantuvo a los de Simeone enredados hasta el zapatazo de Saúl

El Atlético de Madrid dio un paso de gigante hacia los cuartos de final de la Liga Europa al ganar por 3-0 al Lokomotiv de Moscú ruso en la ida de la eliminatoria de octavos de final en el estadio Wanda Metropolitano, con tantos de Saúl Ñíguez, Diego Costa y Koke.

Saúl desequilibró el encuentro en el minuto 21 del partido con un zurdazo desde 30 metros de distancia, Costa aumentó la cuenta en el 47 al rematar el rechace del portero brasileño Guilherme, al disparo anterior del francés Antoine Griezmann, y Koke cerró el duelo en el 90 a pase de Juanfran Torres desde la banda derecha. 

Axel Werner ocupó la portería rojiblanca ante la baja de Oblak

La próxima semana tendrá lugar la vuelta en Rusia, a la que el conjunto rojiblanco llegará con tres goles de ventaja, sin ninguno en contra y, sobre todo, con la sensación, visto lo visto en el duelo de ida en el Wanda Metropolitano, de que su nivel está muy por encima del líder de la Liga rusa.

UN TROFEO. "Tenemos ganas de ganar un título y todo empieza aquí", decía Koke en la víspera. El Atlético, alejado de la Liga con la decepcionante derrota en el Camp Nou, apunta a la Liga Europa, la oportunidad de levantar un trofeo casi cuatro años después, además en un torneo en la que su papel de favorito es hoy indiscutible.

Lo sigue siendo después del encuentro de ida de los octavos de final frente al Lokomotiv Moscú, al que superó primero con el protagonismo incontestable de Saúl Ñíguez, que destrozó en el minuto 22 el muro que había planteado el equipo ruso.

No era una acción aparentemente inquietante para el Lokomotiv cuando Saúl agarró la pelota en medio campo, regateó a un rival, condujo la pelota y, al no ver a nadie, se preparó un zurdazo desde 30 metros luego inalcanzable para el guardameta, que se estiró, pero ni siquiera rozó el sensacional tiro del internacional rojiblanco.

No cambió su estructura tampoco con el 1-0. No le parecía quizá al Lokomotiv un mal resultado para la vuelta en Moscú, inalterable en su fisonomía inicial, con el peso y el control del partido del Atlético, pero, a la vez, sin la precisión que exige un oponente cerrado, al que intentó abordar de mil maneras, aunque sólo logró ocasiones claras por los propios errores de un adversario inferior.

Como por ejemplo la aventura fallida que emprendió su portero, Guilherme, frente a Antoine Griezmann, cuando le intentó regatear en la banda. El internacional francés le arrebató el balón con suma facilidad. Su tiro inmediato, raso, tocado, para asegurar su dirección hacia la portería, se desvió fuera por menos de un metro.

Otro ejemplo, el solitario remate del atacante galo dentro del área, después de un centro perfecto de Saúl. La ágil respuesta de Guilherme evitó el 2-0 a la primera, pero ahí estaba atento Diego Costa para aprovechar el rechace al minuto y 34 segundos del segundo tiempo para acomodar la ventaja del Atlético, mucho más con el 3-0 de Koke, asistido por Juanfran, en los instantes finales del duelo.

En otros encuentros jugados a la misma hora, el Milán perdió 0-2 con el Arsenal, el CSKA 0-1 con el Lyon y el Borussia Dortmund 1-2 con el Salzburgo. 

Ficha técnica:
3 - Atlético de Madrid: Werner; Juanfran, Giménez, Lucas, Filipe; Correa (Fernando Torres, m. 74), Thomas, Saúl, Koke; Griezmann (Vitolo, m. 66) y Diego Costa (Gameiro, m. 74).
0 - Lokomotiv Moscú: Guilherme; Ignatyev (Lysov, m. 53), Krevkelia, Corluka, Pejcinovic, Rybus; Anton Miranchuk (Kolomeytsev, m. 72), Denisov, Manuel Fernandes; Aleksei Miranchuk y Éder.
Goles: 1-0, m. 22: Saúl, con un zurdazo desde unos 30 metros a la escuadra. 2-0, m. 47: Diego Costa aprovecha un rechace del portero Guilherme a remate de Griezmann. 3-0, m. 90: Koke, a pase de Juanfran.
Árbitro: Jakob Kehlet (Dinamarca). Amonestó al local Correa (m. 66) y al visitante Aleksei Miranchuk (m. 33).
Incidencias: partido de ida de los octavos de final de la Liga Europa, disputado en el estadio Wanda Metropolitano ante unos 40.000 espectadores. Antes del inicio del encuentro se guardó un minuto de silencio en memoria de Davide Astori, capitán de la Fiorentina fallecido el pasado domingo a causa de un paro cardiaco.