Unas 5.000 personas secundaron este jueves una movilización apoyada por partidos políticos, sindicatos, empresarios y tejido asociativo para respaldar la continuidad de la central de Endesa en As Pontes.
El recinto permanece paralizado desde hace cinco meses por los altos costes en el mercado de emisiones de dióxido de carbono. La protesta ha supuesto el cierre temporal de comercio y hostelería en la villa, de unos 10.000 habitantes y cuyo principal sustento económico deriva de la planta.
La problemática ya ha provocado cerca de 30 despidos de transportistas, encargados de recoger el carbón en el puerto exterior de Ferrol. El alcalde pontés y presidente de la Diputación de A Coruña, Valentín González Formoso, ha aplaudido la "afluencia masiva" a la manifestación, con la presencia de "más de 20 alcaldes". "La preocupación es enorme, tiene que servir de llamada de atención de nuevo", ha declarado el regidor.
De este modo, ha exhortado a los ministerios de Industria y Transición Ecológica y a la Xunta de Galicia a que se "sienten en una mesa".
En paralelo, ha reclamado que Endesa también propicie ese diálogo y que se implementen los "mecanismos que hagan funcionar de nuevo la central". En este sentido, ha aludido a las pruebas que ejecuta el grupo eléctrico para encontrar "alternativas de combustible que encajen". Para ello, González Formoso, que ha leído un manifiesto al término de la marcha, ha demandado el "apoyo institucional y el compromiso de la empresa". E
l presidente del PP en la provincia de A Coruña, Diego Calvo, ha estimado que transportistas o plantel de la compañía principal "ven en peligro sus puestos de trabajo". Por este motivo, ha pedido que se "cambien las posturas del PSOE y del Gobierno de Pedro Sánchez".
A su juicio, "pone en peligro toda una infraestructura muy importante en la comarca". Por su parte, el portavoz de los transportistas, Manuel Bouza, ha advertido de una primera tanda de unos 28 despidos en su colectivo: "Hay mucho camión que igual no puede volver a trabajar". Finalmente, ha reclamado que todas las partes implicadas aborden la situación y ha criticado que Endesa "se esconde y tiene también culpa".
RECORRIDO ALTERADO. La elevada afluencia de ciudadanos a la protesta ha obligado a alterar su recorrido hasta que su cabecera prácticamente se solapó con las últimas personas que abandonaban el punto de inicio, la céntrica plaza del Carmen.
Este evento ha sido el cierre a una jornada que comenzó con un paro de 24 horas de duración en el tejido auxiliar de Endesa As Pontes desde la medianoche de este jueves. Fuentes sindicales elevaron el seguimiento al 100 % y detallaron que únicamente operaron servicios mínimos por cuestiones de seguridad.
Una manifestación espontánea por la mañana
El personal de las auxiliares de la térmica, trabajadores de Endesa, camioneros, prejubilados, jubilados y vecinos de As Pontes participaron por la mañana en una manifestación espontánea por las calles de la localidad.
La marcha, que paralizó las principales arterias de la localidad, partió de la térmica, donde el 100% de los trabajadores de las auxiliares secundaron la huelga. A ella se sumó también la totalidad de la plantilla de la eléctrica (la dirección autorizó que no entrasen, pese a que no estaban llamados más que a un paro de una hora).
