El lunes negro despertó a todos con el pie izquierdo, sobre todo aquellos que habían invertido más en monedas como el Bitcoin y otras similares en popularidad. Los mercados en general se desplomaron y las criptomonedas esta vez no se salvaron.
La incertidumbre provocada por los nuevos precios del petróleo, en medio de la crisis provocada por el coronavirus parecía haber dilapidado a los inversores en una violenta reversión de la tendencia alcista en la que las criptomonedas, como activos especulativos presentaban desde la semana pasada.
Sin embargo, Ripple ya para la mañana del 10 de marzo, justo el martes siguiente al evento, mostraba signos de recuperación. Una fuerte subida que la ubicó en su punto máximo a las 8 de la mañana, para luego registrar una resistencia profunda que daría paso a una nueva subida.
¿Cómo operar Ripple puede mejorar mi trading en criptomonedas?
Históricamente, Ripple se ha caracterizado por una estabilidad inusual entre las criptomonedas. Si bien es cierto que Bitcoin, se lleva la medalla como la criptomoneda más rentable en tiempos alcistas, Ripple es una opción mucho más segura para principiantes y para traders que recién se aventuran al trading con criptomonedas.
El trading derivado de Ripple como CFD permite a los traders obtener mejores resultados a la hora de predecir y seguir la tendencia. Esto es porque la criptomoneda no está necesariamente anclada al precio del Bitcoin, como muchas veces parece ocurrir (aunque no sea así directamente) con otras monedas.
Ripple también es conocida como la criptomoneda de los bancos, pues en algunos casos es utilizada como moneda de reserva o como activo comercial por parte de las instituciones bancarias. Esto provoca una mayor confianza en el activo por parte de algunos sectores conservadores del trading.
El precio del Ripple, uno de los criptoactivos más estables
El precio de compra del Ripple, además, se mantiene por debajo de 1$, incluso por debajo de 0,5$. Estos precios reducidos permiten a los inversores comprar grandes volúmenes de Ripple con relativa facilidad y aprovechar los movimientos de precios más mínimos para obtener ganancias bastante significativas.
Ripple se convierte así en un activo comercial especulativo extremadamente rentable que permite a los traders operar con confianza a Fiat u a otras criptomonedas. En brokers de CFD, la ventaja más grande es la facilidad en cuanto a la medición y análisis de tendencias en gráficas de velas y lineales.
En los últimos años, Ripple ha vendido más de 5 mil millones de unidades de su criptomoneda, lo que ofrece un vistazo caro de la rentabilidad del mismo, pues se ha convertido en una de las criptomonedas de más rápido crecimiento. Si bien la competencia la sigue ganando Bitcoin, Ripple es una excelente alternativa para los traders minoristas o para quienes quieren invertir en grandes volúmenes.
En la actualidad, se encuentra de tercera en la mayoría de los rankings de criptomonedas en todo el mundo y su crecimiento exponencial la convierte en la nueva estrella en el trading de criptomonedas, reemplazando a lo que un día fue Litecoin.
