JULIO GARCÍA COMESAÑA

"Si los datos empeoran volverán las restricciones, sea Navidad o no"

Julio García Comesaña, conselleiro de Sanidade, se muestra "satisfecho" al ver que las medidas "duras" que se ven obligados a adoptar funcionan
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photo_camera Julio García Comesaña, en su despacho. PEPE FERRÍN

El primer contagio en Galicia se detectó el 4 de marzo. ¿Dónde estamos nueve meses después?

Parece que pasó mucho tiempo, pero nueve meses es poco y ya cambiaron muchas cosas. Cambió nuestra percepción del riesgo, de las relaciones y de la vida, no sé si para bien o para mal. Y a nivel sanitario aprendimos mucho. Pero hay cosas que siguen como el primer día, como la importancia de la higiene de manos, la limpieza de superficies, el uso de la mascarilla que ya veíamos en la gente de países asiáticos a los que llamábamos raros, el cuidado en la interacción y la movilidad...

¿Y aprendimos a tomarnos el virus en serio o todavía no?

Yo creo que sí. Hay que pensar que un número importante de gallegos perdió a algún familiar y alguno incluso tiene la percepción de que lo pudo contagiar. La población gallega en general es conocedora del riesgo que supone este virus y otros que pasaban inadvertidos, aunque entre tanta gente siempre puede haber a quién le cueste más. Pero entre el comportamiento de la población y el trabajo de los profesionales sanitarios conseguimos que Galicia tenga mejores datos en esta pandemia que el resto de España.

Llegamos al pico en abril, conseguimos vaciar las Uci en junio y ahora volvimos atrás. ¿Qué falló?

Hay cosas que se hicieron bien, sobre todo al principio cuando a nivel de Atención Primaria y hospitalaria se contuvo un virus que llegó de golpe. Desde entonces hubo un seguimiento y se adoptaron medidas, no siempre fáciles, que funcionaron. El motivo de lo que pasó ahora se explica por varios factores. Por ejemplo, cortamos la primera ola con la medida drástica de meternos todos en casa, pero ahora tratamos de hacerlo manteniendo la actividad laboral, educativa y sanitaria y sin confinarnos en casa.

Hay que poner eso en valor. Hay lugares donde las medidas funcionaron antes, pero en Lugo y Pontevedra, por ejemplo, cuesta más bajar los casos. ¿Por qué?

Hay una relación directa entre movilidad e interacción y la transmisión del virus. En mayo la movilidad se cortó de golpe y así se evitó la propagación. El hecho de mantener ahora la movilidad hace que vayamos más despacio y en algunos lugares hay características propias que pueden condicionar como la orografía, la situación y las relaciones sociales, etc. Además, A Coruña, Santiago y Ourense empezaron antes con las medidas, así que las cuatro semanas no cuentan igual para todos.

¿Cree que se multa poco?

Las multas sirven de ejemplo para el infractor y también para otra gente, pero si no acaban materializándose ese efecto disuasorio se puede perder. Aquí teníamos un problema para tramitar las multas que ahora, tras varias reuniones y gestiones, se resolvió, así que una vez empiecen a llegar esas sanciones su efecto se notará.

¿Todas las decisiones se toman en el comité clínico o hay alguna que se adopta al margen?

Un número importantísimo salió del comité clínico. Diría que excepto las de ámbito nacional como el toque de queda, que incluso nosotros habíamos valorado ya en Galicia, todas las que aplicamos fueron planteadas, discutidas y consensuadas en el comité.

¿Y hay mucha tensión entre la parte médica, la económica y la política?

La justa y necesaria. En el fondo nuestros clínicos son personas que viven en la calle, interaccionan y son conscientes de las dificultades económicas de nuestra sociedad. Y a su vez, la gente con menos criterio sanitario también respeta la opinión de los clínicos. Así que se da una combinación perfecta donde cada uno expone su visión. Yo participo en el comité desde su creación y estoy satisfecho de presenciar debates ricos y, sobre todo, de ver que las duras decisiones que se toman tienen efecto al cabo de unas semanas de aplicación; eso es muy satisfactorio.

binary comment¿Seguirán el modelo actual de aplicar medidas quirúrgicas por zonas en base a la incidencia del covid?

Tal cual. Nos reunimos cada martes 35 personas y parte de ellas también los viernes, y estamos en contacto casi a diario. Al final, dedicamos cuatro, cinco o seis horas a analizar los datos al detalle, con la aportación que hacen además las jefaturas territoriales, que son las que conocen los brotes más de cerca y nos aportan información muy valiosa que no aparece en las gráficas; y eso enriquece mucho el análisis. Ocurrió por ejemplo cuando saltó el brote del balonmano de Cangas, con unos treinta casos, al mismo tiempo que tres positivos en A Guarda que tenían un seguimiento más difícil al estar desconectados. Pues nos preocupaban más estos últimos pese a ser menos. Las jefaturas territoriales conocen los casos de cerca, llaman y contactan y nos indican si están controlados o no.

¿Por qué no se dan los datos por ayuntamientos?

Ahora los damos. Al principio los dábamos por tramos a través del mapa del semáforo, que funcionó bien, pero los colores se empezaron a asociar a las restricciones, así que decidimos finalmente incorporar los datos de los casos activos, excepto cuando son 0 o cuando hay entre 1 y 9 casos por concello, que no se especifica la cifra. La razón es que es información muy sensible, porque si en un sitio pequeño hay un solo positivo y acaba trascendiendo, eso puede afectar a su entorno, a su negocio, etc... La información la tiene quien la tiene que tener: los sanitarios y los pacientes.

¿Por qué decidieron aligerar las restricciones incluso en las zonas más afectadas de Galicia?

Por la tendencia, porque veíamos que era buena. Pero eso no significa que nos relajemos, porque al mismo tiempo seguimos poniendo limitaciones en otros, como acabamos de hacer en Boiro. Si mañana una ciudad de las que aliviamos vuelve a tener datos preocupantes, se aplican nuevas restricciones. Los datos se monitorizan a diario: si van bien se relajan las medidas y si van mal pues volvemos a pedir un esfuerzo adicional a los gallegos.

¿Le da miedo este puente?

Vamos a ver, nosotros seguimos manteniendo un porcentaje alto de gallegos sometidos a limitación de movilidad y los que no la tienen es porque sus números son buenos a nivel epidemiológico. La clave aquí es apelar a la responsabilidad individual, pero estoy convencido de que los gallegos harán un uso correcto de la movilidad, seguirán las recomendaciones del uso de la mascarilla y se reunirán solo con quien sea necesario.

¿No cree que el protocolo para la Navidad es demasiado permisivo?

Sigue habiendo concellos con limitación de movilidad, un número importante, y se mantiene el toque de queda a las 23.00 horas. Y en algunos que dimos más libertad a la hostelería muchos tienen que cerrar a las 17.00 horas y se potencia el exterior, que es lo más adecuado. No es como en verano, que no había restricciones. E insisto en que si los datos empeoran se vuelve atrás, sea Navidad o no.

¿Y cómo pasará el conselleiro estas fiestas?

Igual que cada día.

binary commentHubo mucha polémica con el rastreo. Ahora que el debate numérico ya parece superado, ¿por qué sigue habiendo problemas de llamadas repetidas o falta de control en algunos casos?

Aquí operan varios actores, algunos muy habituados a trabajar coordinados e intercambiar información y otros más nuevos. En la primera ola, como todo en ella, cada actor fue aportando lo mejor de sí mismo para controlar los casos. Pero hubo un momento en el que hubo que hacer un protocolo de seguimiento de casos activos. Se hizo y funcionó razonablemente bien durante un tiempo. Pero cuando empezaron a aumentar los casos en octubre se generó algún problema, la mayoría de ellos a mayores, es decir, por llamar varias veces a la misma persona, que en el fondo es mejor que sea así que que no te llamen. Entonces decidimos acotar más el trabajo de cada uno para ajustarlo mejor. Hoy Microbiología envía automáticamente al médico de Primaria si tiene algún positivo en su cupo de pacientes; el médico lo llama y le comunica las medidas de aislamiento; luego la central, que antes no había, hace el listado de contactos estrechos y se comunica con ellos para pedirles la PCR, un trabajo que entendimos que podía hacer alguien que no era médico para liberar así a los profesionales sanitarios; y finalmente el seguimiento diario de contactos lo hacen los militares. Así que el protocolo cada vez está más reforzado y va mejorando, y aunque es cierto que cuando aumentan mucho los contagios se tensa, en general Galicia no rastrea mal.

¿Obligó el coronavirus a retrasar operaciones y consultas?

Evidentemente una situación así, sobre todo en la primera ola, te obliga a frenar durante un tiempo y eso produjo un retraso en intervenciones. Pero pusimos todo el acento en retrasar solo aquellas consideradas demorables, ya que en las urgentes y las de prioridad uno estoy seguro de que no hubo retrasos. Pero no voy a negar que hubo operaciones demorables que se retrasaron. Cuando volvimos a la normalidad a principios de junio hicimos un esfuerzo para recuperar ese tiempo y se trabajó mucho, pero también hubo que compaginarlo con intentar que los profesionales se fueran de vacaciones en verano porque se preveía un repunte durante el otoño que por desgracia se produjo, así que en verano no pudimos recuperar todo lo que queríamos de esas operaciones demoradas al priorizar el descanso del personal. Pero quiero destacar y poner en valor el trabajo de los profesionales relacionados con Oncología, que mantuvieron todas las operaciones de prioridad 1 durante este tiempo y mantuvieron las respuesta a las vías rápidas. La demora en vías rápidas de cáncer incluso bajó en este periodo y a nivel tanto quirúrgico como de tratamiento no se dejó de atender a ni un solo paciente en este tiempo.

"Sería el primero en vacunarme para demostrar que es segura"

El calendario de vacunación del ministerio apunta a la mitad de la población española vacunada en junio. ¿Es creíble?

Podría ser. Galicia participa en el grupo de trabajo de vacunas a través de un técnico y con la información que tenemos de la última reunión, este viernes, hay bastantes posibilidades de que los plazos que se den estén por ahí. Aunque dependerá de una serie de hitos. El día 29 se presenta la primera vacuna en la Agencia Europea del Medicamento (Ema) , que se comprometió a responder en tres días. Si se retrasase o se detectase algún problema se retrasaría todo, pero si todos estos hitos vinculados a la seguridad y eficacia de las vacunas se cumplen, se puede cumplir el calendario anunciado.

¿Usted se la pondría?

Si tengo que ser el primero o el segundo para que la gente vea que es segura, sin problema.

¿Asume ya una tercera ola tras la Navidad y que coincida con la gripe o se puede evitar?

El riesgo de que llegue la gripe está ahí y por eso hicimos la mayor campaña de vacunación de nuestra historia. Y aunque los datos del hemisferio sur son buenos y por ahora no hay ningún caso confirmado de gripe en Galicia, trabajamos con la hipótesis de que la gripe venga como siempre en enero y está abierta la posibilidad de que coincida con el covid. Así que no vamos a relajar nuestras precauciones.

¿Faltaron vacunas de gripe?

La campaña de la gripe se dirige a una población diana: grupos de riesgo; ese es nuestro objetivo y conseguimos cifras históricas de participación.

"Si hacen falta más profesionales se pondrán los que se necesiten"

El Sergas tendrá en 2021 el mayor presupuesto de su historia y, pese a ello, hay quejas de que no llega.

La demanda en sanidad no podemos decir que sea infinita, pero siempre es muy grande. La clave del presupuesto es usarlo del mejor modo posible, en tratamientos que aportan valor de verdad, en no dejar a ningún colectivo vulnerable sin diagnóstico ni tratamiento, en seguir aumentando la prevención, en no olvidarnos de la cronicidad, la oncología ni tampoco de las tiempodependientes como las de corazón y neurológicas, porque ante una situación lógica de ir menos al médico tenemos que insistirle a esos pacientes que no dejen de acudir a Primaria o al hospital al tener síntomas, porque el tiempo juega un papel fundamental en ellas.

Una de las demandas más habituales es la de más personal.

Incorporamos en este tiempo a 1.700 profesionales adicionales a los que hay todos los años. Y es personal que entró en marzo con la ola de covid, pero los mantuvimos después cuando ya se superó, ahora están en esta segunda ola y seguirán estando ahí mientras sea necesario. Creo que se valora poco pero es un incremento muy importante. Y si hacen falta más profesionales, se pondrán los que sean necesarios.

binary commentEn su comparecencia parlamentaria avanzó un nuevo modelo de Atención Primaria. ¿Cómo será?

Antes del coronavirus ya se había hablado mucho con profesionales de Primaria y se había diseñado una estrategia de reforma del servicio que incluía incorporar a un grupo importante de profesionales, que se mantuvo en 2019, 2020 y se mantendrá en 2021. De las propuestas a corto plazo que se plantearon la mayoría ya están en marcha. Quedan las de medio y largo plazo. Y está el reto de poner en marcha el plan vertebrador para Primaria que se presentó en octubre. Queremos seguir con ese modelo en el que la atención comunitaria gana peso.

También gana peso la atención telefónica. Los acusan incluso de abusar de ese recurso. ¿Lo ve así?

La atención telefónica es una herramienta en la que el Sergas fue pionero desde 2013. Cuando un paciente pide cita se le preguntaba si podía ser resuelta telefónicamente, se marcaba y se agendaba con el mismo tiempo que el resto de pacientes. Y si el médico estimaba que era necesario recurrir al formato presencial se lo decía. Ese sistema ya tenía 3 millones de consultas anuales, pero llegó la pandemia y todavía se consolidó más su uso. Si me preguntan si me parece bien que un paciente antes de ir a un centro de salud reciba la llamada de su médico y después el médico decida, por supuesto que me parece bien. Es un cribado, una priorización, una herramienta que nos fue muy útil en la pandemia. Si funciona bien, profesionales y pacientes deberían de estar contentos. La atención no presencial nos parece positiva, pero usada de forma correcta.

Galicia, por sus características, tiene muchísimos núcleos de población. Disponer de una red de centros de salud tan amplia parece inviable en la práctica.

Tenemos una red de centros de salud espectacular tanto en número como en características y seguimos trabajando en él. Nos gusta el modelo de tener los centros cercanos a la población, pero la duda es si lo podemos mantener en el tiempo porque el problema es nuestra capacidad de conseguir los médicos de familia necesarios. Este será el año que más médicos de familia formemos al aprovechar el 100% de nuestra capacidad docente y seguiremos pidiendo al ministerio que nos acredite más.

Otro modelo de centro de salud es el integral, como el que perfilan en Lugo. ¿Cuándo estará listo? ¿Es un modelo exportable a otros sitios?

El horizonte de apertura del centro de A Residencia es muy cercano y claro que es exportable. El centro de salud de Lalín tendrá características similares y también el de Cangas comparte filosofía. La idea es la de poco a poco seguir acercando los servicios a la población dentro de un modelo eficiente. Y si es difícil encontrar profesionales pues nos apoyaremos en las nuevas tecnologías y en la opción de combinar jornadas presenciales con otras no presenciales.

¿Y cuál será el futuro de los hospitales comarcales? Hay voces que auguran su desmantelamiento.

Este año invertimos 6 millones en ellos y seguiremos porque en todos habrá reformas importantes y se irán dotando de más servicios como oncología, digestivo, rehabilitación... Juegan un papel fundamental y en un momento como este en el que es difícil conseguir profesionales resulta más operativo tenerlos dentro de un área integrada y no que funcionen como hospitales aislados.

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