Orden de alejamiento para el monfortino acusado de agresión sexual y secuestro

La Policía Nacional rescató a la víctima, de origen dominicano, en una ferretería ubicada en la Rúa Doutor Casares

Ferretería en la que supiestamente se produjo la retención ilegal y el abuso sexual. L.A.R.
photo_camera Ferretería en la que supuestamente se produjo la retención ilegal y el abuso sexual. L.A.R.

El juzgado de instrucción número 1 de Monforte ha decretado libertad, con prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima, para el monfortino de unos 30 años de edad que fue detenido en la mañana del martes por la Policía Nacional acusado de dos delitos, unos de secuestro, en concreto detención ilegal; y otro de agresión sexual.

Los hechos, según las fuentes consultadas, ocurrieron en la ferretería en la que trabaja y en la que ejerce como uno de sus responsables de gerencia, la situada al principio de la Rúa Doutor Casares (A Pena) y cuya parte trasera da al Paseo do Malecón, cuando el agresor contrató los servicios de una prostituta –la víctima–.

Según testigos presenciales, varias dotaciones de policía acudieron de madrugada hasta este céntrico establecimiento de la ciudad alertados por la víctima, una mujer mayor de edad de origen dominicano, que quedó encerrada en el establecimiento después de, supuestamente, sufrir diferentes vejaciones por el acusado.

INVESTIGACIÓN. Tal y como relatan fuentes policiales, el detenido presuntamente le sacó a la mujer el dinero que previamente le había pagado por un servicio y después la dejó encerrada en el negocio de su familia.

La información que manejan los investigadores es que después de mantener relaciones el hombre no "quedó satisfecho", por lo que le reclamó a la mujer el dinero que previamente le había pagado y la amenazó para que se lo devolviese.

El presunto agresor fue detenido a primera hora de la mañana del martes y trasladado a la comisaría de la Policía Nacional, donde fue llevado a uno de sus calabozos.

El hombre pasó a disposición judicial en la mañana de este miércoles y ha quedado en libertad con orden de alejamiento con respecto a la víctima. Según ha informado el TSXG, se le acusa de un delito de robo con violencia. 

POSIBLE CASTIGO. El acusado se enfrenta a importantes penas de cárcel por su acción, ya que el Código Penal establece que todo aquel que encerrase o detuviese a otro, privándole de su libertad, será castigado con la pena de prisión de cuatro a seis años.

En cuanto al delito de agresión sexual, se dice que atentar contra otra persona utilizando violencia o intimidación, sin llegar a haber penetración, supone una pena de prisión que tiene un coste desde un año a cinco de prisión.