El parkinson, una enfermedad que afecta a unos 13.100 gallegos

Los síntomas más conocidos son el temblor, la rigidez y la lentitud, pero hay otros como los trastornos del ánimo —apatía, depresión— y la conducta, problemas de sueño y estreñimiento, que condicionan mucho la calidad de vida

 

Neuronas nun proceso de párkinson. AEP
photo_camera Neuronas en un proceso de parkinson.AEP

En Galicia hay 13.116 personas con parkinson, y más del 80% de los cuidadores de estos pacientes son familiares directos —43% son hijas, 22% parejas y un 7,5% son nueras de la persona afectada—, según datos del estudio ÉPOCAi. "Para ellos es también necesario conocer la evolución de la enfermedad, ya que, en los casos avanzados, las personas que la padecen requieren unos cuidados muy específicos", señalan desde la Asociación Ourensana de Esclerosis Múltiple, ELA, Párkinson y otras enfermedades neurodegenerativas AODEM, que este jueves organiza, con la colaboración de la compañía biofarmacéutica AbbVie y de la Federación Española de Parkinson (FEP), una jornada que abordará la sintomatología y otros aspectos de esta patología. 

El objetivo es "formar, tanto a pacientes como a cuidadores, en torno a la enfermedad de parkinson", así como dar a conocer los síntomas cuando ésta se encuentra en fase avanzada o cómo preparar la visita al neurólogo. Por otro lado, en la jornada se dará a conocer la "importante labor", destacan los organizadores, que realizan las asociaciones de pacientes, dirigidas tanto al afectado como al cuidador.

 SÍNTOMAS. Esta patología degenerativa se caracteriza por sus síntomas, motores y no motores, los cuales generan dificultades en las actividades cotidianas de las personas que lo padecen. Además, indican que conforme progresa la enfermedad, la calidad de vida y autonomía de las personas con enfermedad de Parkinson se ven mermadas dados el incremento y la gravedad de los síntomas. Entre ellos, los más conocidos son los síntomas motores como el temblor, la rigidez y la lentitud. 

Por su parte, los menos conocidos son los síntomas no motores, como los trastornos del ánimo —apatía, depresión— y la conducta, problemas de sueño y estreñimiento, que condicionan mucho la calidad de vida.