Aneurismas e Hiperplasias de Próstata, entre las enfermedades más habituales en los hombres de España

Servei ofrece tratamientos especializados para las dolencias que más frecuentan a los hombres de avanzada edad en España
PUBLI ANEURISMAS Y PRÓSTATA

Hay muchas enfermedades que nos rodean a diario, y más ahora que estamos siendo testigos de una pandemia que está cambiando el ritmo de vida en muchas ciudades tanto dentro como fuera de España. Todos nos hemos enfrentado alguna vez a algún resfriado, alguna gripe o incluso a otras dolencias que pueden ser menos habituales.

Pero, ¿y cuáles son aquellas a las que tendremos que enfrentarnos cuando alcancemos cierta edad? Como recoge SERVEI, la Sociedad Española de Radiología Vascular e Intervencionista, el aneurisma y las hiperplasias de próstata son las más habituales. De hecho, algunas de ellas se dan en el 90% de los hombres de más de 70 años del país.

Seguramente hayas oído hablar alguna vez del aneurisma de aorta, o incluso de esas hiperplasias prostáticas que tanto se dan al alcanzar cierta edad. Ambas están adquiriendo una frecuencia bastante preocupante entre las personas de avanzada edad, y lo cierto es que pueden ser realmente peligrosas, ya que su efecto puede ser devastador en el organismo.

Por eso, además de conocer sus nombres, también conviene conocer en qué consisten, cuáles son sus síntomas y cuáles son sus tratamientos. En ocasiones, pueden ser dolencias que se mitiguen fácilmente y con un buen seguimiento; pero también hay circunstancias en las que la cosa puede ir a mayores y sea necesaria una intervención quirúrgica. Ahí es cuando el peligro realmente asoma, como también esa faceta de “asesino silencioso” que tanto se señala, por ejemplo, del aneurisma aorta.

¿QUÉ ES EL ANEURISMA DE AORTA?

El aneurisma de aorta es una enfermedad que se caracteriza por la dilatación de la vena aorta. Una zona más débil comienza a agrandarse y expandirse a medida que el flujo sanguíneo pasa por ella. Algo que puede comenzar siendo un inconveniente sin importancia, pero que puede acabar provocando el estallido de una de las venas más importantes del organismo.

La aorta conecta el corazón con el resto del cuerpo, y un fallo en ella puede provocar una ausencia de riego sanguíneo severa y, en ocasiones, hasta letal. El principal problema que tiene es que su sintomatología no es demasiado notable, salvo que se siga de cerca. Por eso es tan importante prestar mucha atención a los hombres que superan los 60 años de edad, ya que son los más propensos a sufrirla, sobre todo si han sido muy fumadores.

Síntomas principales

Los principales síntomas del aneurisma de aorta abdominal, o AAA, son un dolor abdominal intenso al que puede acompañar uno en la parte inferior de la espalda, normalmente extendido hacia ingle, piernas o nalga. Además de eso, también puede haber una mayor presencia de fatiga y tener la sensación de que hay pulso en el abdomen.

La forma más fácil de detectar esta enfermedad es cuando se perciben masas extrañas en la zona abdominal, aunque esto es algo que no sucede con frecuencia. Hay que prestar mucha atención a los síntomas anteriores, ya que son los más habituales y claros indicativos de que hay un problema.

El aneurisma de aorta puede pasar de no necesitar tratamiento alguno hasta necesitar una intervención quirúrgica. Si crece constantemente, es fundamental acudir cuanto antes a un médico para que proceda con la operación pertinente para evitar que el problema vaya a mayores. Si no hay un gran crecimiento, puede mitigarse y solucionarse fácilmente, siempre y cuando no se realicen grandes esfuerzos ni haya grandes cambios de tensión.

¿QUÉ ES LA HIPERPLASIA DE PRÓSTATA?

La Hiperplasia de Próstata es el agrandamiento de la glándula prostática. Un problema médico que afecta a, aproximadamente, el 90% de los hombres de más de 70 años y que puede ser inofensivo, pero también realmente peligroso.

Ese agrandamiento puede provocar que el flujo de orina se obstruya o que disminuya, generando así problemas a la hora de ir al baño o incluso provocando dolores en el tracto urinario inferior. Por lo general, su diagnóstico se realiza a través de un examen detallado y la solución pasa por un tratamiento conocido como embolización de próstata.

Síntomas principales

Todo lo relacionado con la orina puede delatar esta hiperplasia. Un flujo deficiente, la repentina urgencia para orinar, las micciones sobre todo nocturnas, el vaciado parcial de la vejiga… Todo esto delata que hay un problema y que, muy probablemente, estemos ante un caso de hiperplasia prostática.

La embolización que se lleva a cabo para tratarla consiste en introducir un pequeñísimo catéter en una arteria para dirigirlo a los vasos sanguíneos de la próstata. Tras esto, se bloquea el flujo sanguíneo con unas partículas que acaban provocando falta de oxígeno en la próstata y, por tanto, una disminución de su volumen.

Tratamiento sencillo para otra enfermedad peligrosa. Y es que, aunque pueden no parecer mucho al comienzo, si avanzan y evolucionan, estas dos dolencias pueden ser letales.