Está aquí al lado y además está de moda

Gêres. EP

Es Portugal y es un país aún por descubrir, próximo y cercano por sus gentes y su cultura y, además, un viaje al alcance de todos los bolsillos. Pocos lugares con tanto encanto están tan al alcance de la mano, y este es uno de ellos. Muchos piensan que conociendo la capital ya han visto todo lo que hay que ver, pero sucede otro tanto que como con el resto del país. Es increíble que una de las ciudades más bellas de Europa sea de las menos visitadas. Y eso es precisamente lo que sucede con Lisboa, capital que refleja fielmente el estilo único de vida portugués, fiel conservadora de sus tradiciones y que sin embargo se entrega a la cultura moderna y sus avances.

Un viaje a Portugal merece conocerlo de norte a sur, remontarse hasta la Edad Media visitando la ciudadela de Bragança, pueblo pintoresco al norte del país y con sus blancas casas situadas en el interior de la fortaleza. 

Pasar al Parque Nacional de Gerês, considerado por la UNESCO Reserva Natural de la Biosfera. Se cruzarán con otros caminantes y también con jabalíes, ciervos, nutrias y más habitantes naturales del Parque. Si llegan hasta la ciudad de Braga pueden subir los 583 escalones de la iglesia del Bom Jesus do Monte y comprobar la forma física. Y, aunque hay aún mucho más que ver en esta ruta desde el norte, si no disponen de muchos días en esta primera visita lo suyo es saltar directamente a Oporto, una de las ciudades más bellas de Portugal. Para recuperarse de la subida de los escalones podrán desayunar su bocadillo francesinha para luego perderse por las callejas de su casco antiguo antes de degustar en el almuerzo una de las deliciosas especialidades de su cocina. Antes de irse no dejen de visitar el lugar que inspiró a la escritora J.K. Rowlling que no es otro que la Livraria Lello e Irmão, una de las librerías más bonitas del mundo; solo visitarla ya merece el viaje. Aveiro, Coímbra y su Universidad, la sierra de Estrela con sus aldeas y pintorescas y donde podrán visitar la Torre en el punto más alto (1.993 metros) del Portugal continental.

Para una visita más íntima y espiritual, pueden parar en el Santuario de Fátima, donde miles de peregrinos de todo el mundo acuden continuamente a ver el lugar donde la Virgen se apareció a los tres pastorcitos. Si tuviesen tiempo una visita en barco a las islas de las Berlengas, reserva natural protegida, y dejando por el camino castillos medievales, Nazaré con los amantes del surf, llegamos a la capital donde una visita al Monasterio de Los Jerónimos es obligada, junto a la Torre de Belem. Y quizás saltando más visitas atravesar el Parque Natural de Arrábida y poner rumbo al Algarve. Días, faltan días. Un viaje a Portugal es asequible, conocerla requiere más de uno. Y el próximo, ¿por dónde empezar? Visiten Expedia paquetes porque en viajes aquí encontrarán las respuestas. Ustedes solo piensen en un viaje a Portugal.