Unos dientes sanos repercuten positivamente en la salud. Además de brindar una buena apariencia, los dientes tienen funciones fundamentales como cortar, desgarrar, masticar, moles y triturar los alimentos. La fusión de todos los dientes convierte los alimentos en una masa lista para ser ingerida. Sin embargo, pocos prestan atención a su salud. De allí que aparezcan microorganismos y bacterias que producen las enfermedades dentales.
Una mala salud bucal
Un buen Dentista en México sabe cuándo el paciente no tiene buenos hábitos dentales. La mayoría las afecciones de los dientes son producidas por microorganismos que nacen en la boca debido a una mala higiene. No obstante, también pueden aparecer por reacción a los alimentos o medicamentos. Y en casos más aislados, a una mala práctica médica.
Cabe mencionar que cualquier enfermedad dental puede terminar en un deterioro de la dentadura. Algunos síntomas que indican que algo no está bien con los dientes son: dolor intenso y sangrado. La pérdida de un diente además de ser un obvio indicio de que hay una enfermedad dental, también es una prueba de que tan avanzado está el problema.
Es fundamental mantener una buena higiene bucal. El cepillado diario después de cada comida forma parte de uno de los pasos de la Guía dentistas algodones para tener unos dientes sanos.
Lamentablemente, son pocas las personas quienes en verdad tienen este buen hábito. Es por eso que son tan comunes las enfermedades dentales.
Enfermedades dentales más comunes
Según profesionales de Dental Del Rio Algodones, las enfermedades dentales más comunes son: la placa dental, el sarro, la gingivitis, la caries dental y la periodontitis. En menos grado aparecen la neuralgia del trigémino,el flemón dental y la pulpitis.
Placa dental
La placa dental supone una película incolora compuesta por bacterias y azucares que se forma en la boca. Tiene una consistencia pegajosa y se adhiere a los dientes de forma constante. El Dentista en Tijuana asegura que esta es una de las principales causas de la aparición de caries en los dientes. Vale mencionar que si esta placa se endurece, puede alcanzar mayor gravedad, convirtiéndose en sarro.
Ahora bien, es importante resaltar que siempre hay placa dental en los dientes pues las bacterias se aprovechan de los residuos de alimentos y la saliva para crecer, adherirse y desarrollarse dentro de la boca. Por eso, se recomienda retirarla diariamente con un buen cepillado.
Sarro
Luego que la placa dental se endurece y aumenta el grosor se convierte en sarro. La acumulación de minerales sobre esta placa produce el endurecimiento formándose también en el borde de las encías y en la zona inferior. La irritación de los tejidos gingivales es el síntoma más común de esta afección.
Fumar o beber alcohol es una de las principales causas del sarro. El consumo frecuente de café, tés oscuros y refrescos puede generar manchas en los dientes. Lo mismo ocurre si no se presta atención a la higiene bucal. Vale mencionar que además de ser un problema de salud, el sarro destruye por completo la estética de la persona.
Caries dental
Probablemente la enfermedad más común de toda la lista. Hay varios factores que originan la caries entre esos los malos hábitos alimenticios. También puede aparecer por factores internos donde hay interacción de dientes, saliva y microbiota oral.
Se trata de una infección donde se alojan una gran cantidad de bacterias en la superficie del esmalte. Durante el proceso actúan ácidos que desintegran la superficie dental. Como consecuencia, se forman pequeños hoyos que aumentan de tamaño según la gravedad del caso.
El daño de una caries puede alcanzar el interior del diente, llegando a afectar incluso la pulpa. Si se descuida, el paciente puede perder por completo la pieza, teniendo que proceder a la extracción de la misma. Cuando la enfermedad afecta un diente adulto (conocido como diente de hueso), no habrá solución más que la instalación de un diente artificial.
Gingivitis
Se conoce como una enfermedad dental pues es causada por la placa dental. Cuando esta se adhiere y acumula en los dientes de manera constante, se produce una inflamación de las encías.
Un cepillado poco frecuente y la falta de uso de hilo dental generan toxinas que irritan en tejido gingival, formándose la gingivitis. Cuando no se trata a tiempo y de la forma adecuada se puede transformar en una periodontitis que causa mucho más daños en los dientes y mandíbulas.
