El consejo regulador de la denominación de origen Ribeira Sacra ha dado por «técnicamente finalizada» la vendimia. Solo están pendientes de cerrar la campaña seis de las 96 bodegas adscritas, algo que ocurrirá en los próximos días.
Este año, la uva recogida alcanzó los 4,7 millones de kilogramos, una cifra similar a la de 2012. De esta cantidad se obtendrán en torno a los 3,3 millones de litros, la mayoría de la variedad mencía, pues fue la más recolectada, en concreto cuatro millones de kilos.
El trabajo se realizó a lo largo de los últimos 19 días, ya que la fecha oficial para iniciar la vendimia se marcó el pasado día 2, sin bien algunas bodegas la adelantaron a finales de septiembre al estar algunos de sus viñedos en zonas donde la maduración fue más prematura a causa de su especial ubicación, en los bancales más bajos y cercanos a los ríos Miño y Sil.
Tanto viticultores como bodegas y consejo regulador de origen mostraron su satisfacción por la alta calidad de la uva recogida, pues este año no hicieron acto de presencia las típicas plagas de los viñedos. El único inconveniente fueron las lluvias y las bajadas de las temperaturas en primavera, que causaron una ralentización en el proceso de floración y maduración del fruto, de ahí que el comienzo de la vendimia se retrasase unos 20 días con respecto a campañas anteriores.
Ahora habrá que esperar unos cinco meses para conocer las verdaderas bondades del vino de esta añada, coincidiendo con el inicio de las primeras ferias vitícolas en la comarca.
