Los retos de seguridad que afrontan las PYMES en el nuevo entorno digital

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En nuestro país se producen una media de 4.000 ciberataques al día que afectan a todo tipo de empresas, desde las más grandes a las más pequeñas. Los ataques de programas maliciosos ponen en jaque a estas empresas, puesto que ponen en riesgo sus datos empresariales además de por el hecho de que los originadores del ciberataque suelen pedir rescates a cambio.

Esto es ocasionado en buena medida por la falta de formación de los trabajadores de las empresas en lo que a ciberseguridad se refiere. Los empleados de las PYMES en el mundo digital suelen hacer uso de contraseñas débiles y fáciles de averiguar por los ciberatacantes. Si a ello le unimos que en ocasiones se conectan a redes públicas sin el uso de una VPN o sin un factor de autenticación extra 2FA, el riesgo de que las contraseñas sean descubiertas se dispara aún más.

En España son muchas las empresas que están tomando medidas al respecto de la ciberseguridad y soluciones como las que ofrecen en CiberProtector, desarrollado al 100% en España por el equipo de Webempresa, son las que mayores garantías aportan a las pequeñas y medianas empresas de nuestro país.

Todas las empresas están en riesgo

Uno de los errores más habituales relacionados con la ciberseguridad es la creencia de que empresas pequeñas están libres de ser atacadas por los ciberdelincuentes. Por ello se relajan y no toman las medidas necesarias para proteger sus datos de sus sistemas informáticos. Pero los datos demuestran que cada vez son más las pequeñas industrias el objetivo de ataque de estos ciberdelincuentes.

Las grandes empresas ya cuentan con grandes inversiones en materia de ciberseguridad y por ello los delincuentes online están desviando sus ataques hacia empresas más vulnerables que invierten menos en ciberseguridad, ya que son un blanco fácil para ellos. Por tanto es necesario asumir que en un ecosistema digital como el actual todas las empresas están en riesgo de ser atacadas.

Rescates económicos a cambio del antídoto

Acceder a las redes de las pequeñas empresas, infectar los ordenadores y equipos de trabajo, encriptar toda la información y pedir rescates es la forma habitual que tienen estos ciberdelincuentes de atacar a las pequeñas y medianas empresas. Y es que de las pequeñas empresas no les interesan la información que puedan conseguir sino el rescate económico del que se pueden beneficiar.

Los trabajadores deben por tanto conocer las prácticas adecuadas para protegerse y evitar que la empresa donde trabajan acabe siendo objetivo de los ataques. Son muchas las medidas de seguridad que se deben poner en práctica y las PYMES deben tomar conciencia sobre la importancia que tienen actuaciones como la instalación de softwares o hardwares de seguridad o la formación de la plantilla en materia de seguridad y de detección de amenazas.

Y es que el nuevo entorno digital les ofrece a las PYMES multitud de oportunidades de crecimiento pero también numerosos riesgos de seguridad para los que deben estar protegidas.

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