Se acerca el tan esperado puente de la Inmaculada y muchos ya están preparando su salida de la rutina hacía un destino con más calor, playas y relajación.
Por su ubicación privilegiada, la costa valenciana es uno de los destinos más buscados en esta época del año, Benidorm, Murcia y Albacete lideran los puntos con mayor confluencia durante esta festividad.
Por si es la primera vez que sales en esta fecha o incluso si eres un viajero asiduo, aquí algunas ideas de dónde ir, hospedarse y comer.
Playa, sol y arena
Los 125 kilómetros del litoral mediterraneo con sus hermosas playas siempre han sido los favoritos de los viajeros, en esta vasta extensión de mar hay decenas de lugares donde descansar. Costa brava, dorada, blanca, del sol, cálida, de azahar, de Almería, las islas baleares, entre otras.
Como toda zona turística, alrededor se puede encontrar con facilidad diversos lugares donde quedarse y disfrutar de una rica comida propia de la zona.
Un dato clave es que en el momento de elegir alojamiento, es mejor hacerlo con anticipación, porque tan solo el año pasado, en Benidorm, por ejemplo, una de las zonas más visitadas, días antes del inicio del puente ya se había registrado un 95% de ocupación hotelera, cifra que estiman se repita este año.
De hecho, desde ya es posible encontrar ofertas de planes para pasar las vacaciones y descuentos de fin de semana en las posadas y resort con mayor movilidad de la costa valenciana.
En todas las playas que integran el litoral se pueden disfrutar de actividades recreativas como el buceo, snorkel, vuelos en parapente, submarinismo, sky acuático, fútbol y volleyplaya, entre otros.
Gastronomía para degustar
Durante los puentes y festivos no todo se trata de las playas e ir a sitios turísticos, degustar de buenos platos propios de la zona visitada también forma parte de la experiencia vacacional.
Al estar en el extremo costero, los platos con deliciosos productos del mar son la primera opción acompañados de verduras y el arroz. Por ejemplo, la paella valenciana es una de las comidas típicas a probar, pero más hacia las fechas donde hace más frío, el puchero o el cocido con pelotas no puede faltar.
Por ser una zona turística encontrar donde probar estas comidas no resulta difícil, hay alternativas dentro de las propias localidades, pero también puntos en la autopista que debido a su calidad se han convertido en una parada obligada, como el Restaurante Los Chopos en la vía A-31, donde los visitantes tienen más de 50 platos de la gastronomía española y mediterránea para escoger.
La carne de cordero y el queso manchego, se unen al listado de delicatessen a degustar, al igual que las migas ruleras que es el plato típico de Albacete.
En cuanto a la gastronomía de este puente religioso, los dulces y postres son los que rigen la demanda, los mantecados, roscos de vino, polvorones… existe todo un abanico de opciones azucaradas.
Otros atractivos
Además de sus hermosas playas, en la costa también se puede disfrutar de otros atractivos turísticos, como el mirador del mediterráneo en Altea.
En Benissa, su joya arquitectónica es la catedral de estilo neogótico de la Marina que atrae la atención de propios y visitantes. Las puntas de esta imponente construcción pueden verse desde cualquier punto de la ciudad.
La Villa Marinera en Villajoyosa, con sus llamativas casas de colores y su centro amurallado ofrecen una alternativa diferente para salir de lo cotidiano de las playas. Tiene espacios históricos que eran visitados por los antiguos piratas que surcaban el mediterráneo.
En Alicante, el castillo de Santa Barbará da la bienvenida a los visitantes en cualquier época del año, sobre todo para las fiestas de la Inmaculada y desde sus torres se puede ver todo el barrio de Santa Cruz, el casco histórico de Alicante, la Basílica de Santa María y la Concatedral de San Nicolás
Destinos tradicionales
No solo las playas valencianas son visitadas, el Levante español también cobra vistosidad en estas fechas, en especial la provincia de Albacete en la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha. Gracias a su ubicación, por esta provincia se cruzan autopistas importantes que conectan con grandes destinos turísticos muy visitados en esta época.
El parque natural Lagunas de Ruideras, con sus 15 lagunas conectadas entre sí por cascadas, saltos de aguas, arroyos y diversos afluentes, suele ser muy concurrido durante la fiesta de la Inmaculada.
La pintoresca zona de Alcalá de Júcar, con sus únicos callejones empinados, monumentos históricos y parajes naturales como el embalse del molinar, parque natural Hoz de Júcar y el Tranco del Lobo representan un punto de parada frecuente para los viajeros que se desplazan por las autovías A-31 y A-3.
Para quienes hacen el recorrido desde Madrid hacía Levante, a lo largo de la carretera hay varias paradas turísticas que pueden ser de gran interés para la familia. La ruta de los dinosaurios, de los cementerios, la ruta de la lana, de la plata y del vino de Don Quijote, cada una muestra una actividad propia de la zona y resalta las tradiciones e historia de España.
