Bebeto y Djukic aclaran la duda del penalti que decidió una Liga

"Sentí que no estaba preparado para tirar", admite en la cinta sobre el SuperDépor el exdelantero brasileño

Bebeto. MOVISTAR
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El brasileño José Roberto Gama, 'Bebeto', y el serbio Miroslav Djukic han aclarado la duda sobre el penalti que decidió la Liga de 1994, que acarició el equipo en el que compartían vestuario, el Deportivo, y que se adjudicó el Barcelona.

A punto de cumplirse 25 años de aquel instante, los dos confirmaron en el programa televisivo de reportajes Informe Robinson la versión oficial sobre aquel lanzamiento desde los once metros en los minutos finales de la última jornada de la temporada 1993/94.

Bebeto había perdido la confianza en la ejecución de los penaltis y así se lo había transmitido al cuerpo técnico de Arsenio Iglesias y Carlos Ballesta jornadas antes del partido decisivo.

"Sentí que no estaba preparado para tirar", admite en la cinta sobre el SuperDépor el exdelantero brasileño, quien también apunta que "tal vez si lo hubiese tirado también lo habría fallado".

"Cuando dudas sobre cómo hacer las cosas, vienen los fallos", apunta el lanzador de aquella pena máxima

El orden para lanzar penaltis en el partido de la última jornada ante el Valencia en Riazor estaba claro: Donato primero y Djukic, que venía de marcar uno ante el Atlético de Madrid en el Vicente Calderón, después, aunque muchos aficionados del Deportivo le siguen reclamando a Bebeto que no tirara aquella pena máxima.

Donato, titular en aquel partido, había sido sustituido, así que, cuando llegó el penalti, el encargado de ejecutarlo, con Bebeto en el campo, era Djukic.

Su mujer, según comenta en el documental, le había dicho antes del partido que si había un penalti no lo tirara, pero le tocó hacerlo, cogió aire y el portero del Valencia lo detuvo.

"Me tocó tirar, fallé y ya está", sostiene el exjugador balcánico, quien confesó que el momento de asumir el lanzamiento es "muy jodido" porque "empiezas una pelea contigo mismo" sobre por dónde tirarlo.

Donato, que había soñado con el penalti, tal y como apunta en el documental, iba a lanzarlo a la izquierda del guardameta. Djukic escogió el lado derecho.

"Cuando dudas sobre cómo hacer las cosas, vienen los fallos", apunta el lanzador de aquella pena máxima, que sintió una "frustración grandísima porque sabes que el trabajo tuyo y de mucha gente se ha ido al traste".

Aquella Liga acabó en manos del Barcelona, pero el fútbol le dio doble revancha al Deportivo: un año después ganó la final de la Copa del Rey al Valencia y en el 2000 se alzó con la Liga que también peleaba con el Barcelona.

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