Casado defiende el pin parental ante el "intervencionismo" del Gobierno

Considera la polémica por el veto de los padres a la participación de sus hijos en actividades escolares una "cortina de humo" para tapar el "escándalo" del nombramiento de Delgado
Pablo Casado, mostrando la Constitución, este domingo en un acto en Murcia. EFE
photo_camera Pablo Casado, mostrando la Constitución, este domingo en un acto en Murcia. EFE

El líder del PP, Pablo Casado, considera que las críticas del Gobierno por la implantación del conocido como pin parental no son más que una "cortina de humo" para tapar el "escándalo" del nombramiento de la exministra Dolores Delgado como fiscal general del Estado. Casado clausuró en Murcia, la región donde desde agosto pasado se da a los padres la posibilidad de vetar charlas para sus hijos en los colegios sobre asuntos como la educación sexual, el acto del PP llamado Gobiernos por la libertad, con participación de alcaldes de las principales ciudades donde gobierna el partido. 

Durante su discurso, el presidente del PP invocó la Constitución, en concreto el artículo 27 que reconoce el derecho de los padres a decidir sobre la educación de sus hijos, para defender esta medida educativa promovida por Vox y aseguró que su rechazo por el Gobierno augura tendencias intervencionistas. 

Casado, que acusó al Ejecutivo de polemizar sobre el pin parental para eludir críticas sobre Delgado al igual que el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, dio la máxima trascendencia al asunto, al que dedicó buena parte de su discurso. 

Y recordó que la ministra de Educación, Isabel Celaá, lejos de rectificar su opinión de que los hijos no son "propiedad" de los padres, se ratificó en ello: "Ya no es broma", apostilló al respecto. 

Casado ha vinculado esta idea al pensamiento de los regímenes comunistas, por lo que afirmó que su preocupación "es máxima", y se preguntó si el Gobierno piensa "como dicen a las familias en Cuba, que los niños son de la Revolución". 

Es más, planteó si "vamos a llegar" a que "los niños delaten a sus padres cuando no son buenos revolucionarios, como pasa en Cuba" o incluso a la "Europa en blanco y negro" de los años del telón de acero cuando "los hijos que delataban a sus padres porque no estaban de acuerdo con el régimen en el que vivían" eran separados de sus familias. 

"De eso estamos hablando, señora Celaá, señor Sánchez, señora Montero", insistió el máximo dirigente del PP, quien alargó su argumentación al mostrarse igualmente preocupado por si en España el soviet de Unidas Podemos o del PSOE acabará expropiando las segundas viviendas de las familias, siguiendo el modelo del '¡Exprópiese!' del venezolano Hugo Chávez. 

LIBERTAD. Ante todo ello, Casado invocó una y otra vez la defensa de la "libertad" que caracteriza al PP, en este caso aplicada a los padres respecto a la educación que reciben sus hijos, y alertó de que lo que está ocurriendo "es el punto de no retorno" y "la línea roja" que nunca se debería traspasar. "Esto es por lo que estamos en política, es más importante que cualquier política sectorial, territorial, económica, es la libertad de nuestros compatriotas, el que nadie meta la mano en nuestros hogares", proclamó el líder del PP. 

Casado dijo también, dirigiéndose al presidente murciano, que la implantación del "pin parental" está "bien" y que "no descubre la pólvora", y lo comparó con la autorización requerida a los padres cuando sus hijos van de excursión con el colegio. Y remarcó que ante las medidas del Gobierno "más radical de nuestra historia democrática" las comunidades y ayuntamientos donde gobierna el PP actuarán como su contrapeso.

Comentarios