El 30 de septiembre se cumplirá el plazo para la puesta en marcha de la "Ruta del vino de la eurorregión Galicia-norte de Portugal", cuya preparación comenzó hace años y que deja como primer resultado visible, la creación de las cinco asociaciónes "Ruta del Vino" de las denominaciones de origen vitícolas de Galicia y la de la D.O. portuguesa "Vinhos Verdes".
Proceso largo
Los socios del proyecto presentado y aprobado por los Fondos Europeos de Desarrollo Rural (Feder) fueron la Comissao Viticultura da Regiao Vinhos Verdes, la Axencia Galega de Desenvolvemento Rural (Agader), la Sociedade de Imaxe e Promoción Turística de Galicia (Turgalicia) y el concello de Ribadavia.
El trabajo conjunto fructificó en cursos de capacitación en enoturismo, un estudio sobre la viabilidad de las rutas del vino y sobre el enoturismo, elaboración de un manual de la ruta transfronteriza, señalización de las seis rutas que la integran, un manual de historia y leyendas del vino,creación de una página en internet y otras.
Poco antes de que finalice el proyecto, hay 200 establecimientos del sector integrando las correspondientes rutas del vino, tanto bodegas como alojamientos, restaurantes, museos, bares, ayuntamientos y otros.
El enoturismo es un atractivo para viajar
Según un estudio general del enoturismo en España aportado a GG por Agader, cerca de la décima parte de los turistas que llegan a España buscan su gastronomía y la relación vino-gastronomía es el objetivo de seis millones de personas que llegan cada año a España.
Además, el 53 por ciento de la población española dijo escoger el destino de sus viajes y vacaciones pensando en la gastronomía y el vino y un 72,62 por ciento hizo alguno de estos viajes con esa motivación exclusiva.
El estudio indica que unos seis millones de personas no españolas buscan vino y gastronomía, igual que otros diez millones de turistas espñoles, y todos ellos aprovechan sus viajes para comprar vino, disfrutar del patrimonio natural y cultural, visitar bodegas, participar en catas y degustaciones e implicarse en fiestas y eventos gastronómicos.
Los viajeros se informan en un 16,34 por ciento por estar suscritos a alguna publicación de enogastronomía, página de internet o revistas especializadas y en general, siguen recomendaciones de amigos y las que ven en páginas web especializadas.
El mismo estudio indica que el gasto medio diario por persona es de 163,62 euros en el que se incluyen el alojamiento y las comidas.
El atractivo aumenta con lo autóctono
Los turistas se deciden en sus viajes por los restaurantes y alojamientos que ofrecen una decoración y ambiente especiales y en menús y cartas la presencia de productos tradicionales de la zona, además de la profesionalidad y el buen servicio.
En relación a los menús, el estudio desvela que para los turistas, una buena comida es la que ofrece calidad en las materias primas, uso de productos de la tierra, recetas tradicionales y una excelente presentación de cada plato.
Sobre la carta de vinos, los turistas esperan una amplia presencia de los vinos de la zona, conocimientos de vino por parte del personal, buena presentación y temperatura para la bebida y oferta de otros vinos de España.
Futuro enoturístico de Galicia
El primer Seminario Internacional de Enoturismo que se celebrará en Leiro los días 21 y 22 de septeimbre, dará a conocer las acciones futuras desencadenadas por el proyecto europeo y los resultados obtenidos por el enoturismo de otras zonas que lo desarrollaron antes que Galicia.
El punto de partida son cinco Rutas del Vino, integradas en la asociación Rutas del Vino de España, algunas ya certificadas como la de Rías Baixas -desde 2005- y Ribeiro -desde 2009- y otras en los últimos trámites aunque ya cuentan con asociación gestora, logotipo y primeras acciones formativas.
La identificación de las diferentes Rutas del Vino de Galicia, y también la de Vinhos Verdes de Portugal, pasa por el uso de colores como los verdes de las hojas y los morados del vino tinto, aunque en el caso de la Ruta del Vino Ribeira Sacra también estará presente el color dorado en un rosetón románico que alude al oro que los romanos esperaban extraer en el norte y noreste de la provincia de Ourense y a la riqueza monumental posterior ligada al arte románico.
Fuentes históricas consultadas por los responsables de la Ribeira Sacra, indican que ante la escasez del valioso metal, los romanos decidieron aprovechar los mismos suelos para la producción de vinos que gozaron de gran prestigio en la corte romana.
