Una entrada para 50 maravillas

Cuando el fotoperiodista Pepe Tejero le propuso al escritor Jorge de Vivero realizar una serie de artículos para El Progreso sobre las cincuenta puertas más impresionantes, bellas y de historia curiosa que se encuentran en las ocho rutas del Camino de Santiago, de Vivero consideró la idea un "disparate". Pero se hizo realidad y ahora es ya también un libro.

Cuando la cosa tomó cuerpo, Jorge dejó de ver un imposible en escribir cada semana algo de interés sobre portadas góticas o románicas del Camino. Pepe, por su parte, siempre creyó en el proyecto por la habilidad para las letras que atesora De Vivero. Las descripciones y narraciones de Jorge despliegan ante el lector los atributos de las puertas y su pasado. La fotografía, creada por Tejero junto a Roberto Díaz, permite al lector observar de cerca, cómo el ojo no alcanza, los detalles visuales de las figuras y relieves que componen estas obras de arte.

Los tres iniciaron una travesía el 26 de mayo de 2021 teniendo como primer destino la puerta santa de la iglesia finisterrana de Santa María das Areas. A partir de ese momento, realizaron el Camino Norte, el Francés, el de Invierno, el Primitivo, el Inglés, el de Fisterra, el Portugués y el de Vía de la Plata. El viaje, cuentan, fue una auténtica exploración y, como todos los exploradores clásicos que remontaban los ríos desde la desembocadura, ellos salieron siempre desde Santiago, remontando los caminos, y llegaban al que sería, para el resto de los peregrinos, el lugar de inicio.

De las 50 puertas que acercan desde hace un año a los lectores de este diario, 19 están en Galicia y 31 en el resto de España, Portugal y Francia. 22.000 kilómetros y 10 meses de trabajo que ahora se han materializado en un libro de viajes con un material fotográfico imponente. Puertas del Camino ya es una realidad con una cuidada edición a cargo de Sesentaráfagas.

De todas las que conocieron, Jorge se queda con una puerta gótica sin templo que está en medio de un campo en Sasamón (Burgos). En sus palabras es un "milagro precioso en medio de la nada". Para Pepe, como fotógrafo, la que más le llamó la atención fue el arco de Cáparra (Cáceres), un arco triunfal en plena naturaleza que fue un cruce de caminos.