Archivada la causa contra la mujer de El Chicle por la muerte de Diana Quer

El juez no ve indicios de que participase en la desaparición de la joven y, aunque encubrió a su marido, recuerda que el Código Penal deja exento de pena a los cónyuges que así lo hagan

Rosario Rodríguez, la mujer de El Chicle. AEP
photo_camera Rosario Rodríguez, la mujer de El Chicle. AEP

El juzgado de instrucción nº1 de Ribeira ha acordado el sobreseimiento provisional y parcial de las actuaciones con respecto a Rosario Rodríguez, la mujer de Enrique Abuín Gey, que, como él, estaba investigada por la muerte de Diana Quer.

El juez considera que "no existen en el momento actual indicios suficientes" para seguir con la acusación sobre ella.

El auto indica que, "a pesar de las variadas declaraciones prestadas por la investigada en sede policial", situándose primero junto a El Chicle durante la noche en que desapareció Diana Quer, posteriormente se retractó en sede judicial.


El juez considera que encubrir a su marido "podría resultar moralmente reprobable" pero no tiene pena según el Código Penal


Según su última versión, Rosario permaneció en la vivienda que compartía El Chicle, algo que el juez considera “contrastado" en base a las diligencias practicadas, especialmente el de su teléfono móvil, que indica que permaneció en todo momento en su vivienda de Rianxo.

También explica el juez en el auto que los informes forenses y del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses no desprenden indicios de la participación en el hecho de varias personas. 

Para el juez instructor, “no existen por tanto en el momento actual indicios de entidad suficiente" que apunten a la participación de Rosario como autora o cómplice en los ilícitos investigados, ni considera posible por ahora practicar diligencias que permitan continuar con las actuaciones contra ella.

"ENTORPECIÓ NOTABLEMENTE LA INVESTIGACIÓN". En cuanto al papel que tuvo como encubridora de El Chicle, al darle una coartada en su primera versión, el juez afirma que tuvo "una participación activa con el fin de desviar las investigaciones policiales dirigidas hacia su esposo”. Sin embargo, y aunque explica que tal conducta "podría resultar moralmente reprobable", ya que entorpeció "notablemente" la investigación, recuerda que el Código Penal deja exentos de pena a los encubridores que lo sean de su cónyuge, excepto en algunas excepciones que no se dan en este caso.