Aumenta la venta de cámaras de vigilancia por temor a los okupas

La okupación se ha convertido en los últimos años en un negocio muy lucrativo para las mafias organizadas. Sin ir más lejos, durante el 2017 existían en España cerca de 90.000 viviendas okupadas. Una cifra que, lejos de menguar, se ha incrementado desde entonces, con especial incidencia en algunos barrios de las grandes ciudades. 

El fenómeno de la okupación ha provocado que miles de personas en nuestro país hayan apostado por la instalación de cámaras de vigilancia en sus viviendas. Y una excelente opción para ello es la web camarasvigilancia.online, el sitio perfecto para encontrar los mejores modelos de cámaras de vigilancia del mercado. 

Estas cámaras de vigilancia actuales son muy sencillas de instalar. Gracias a ellas, vamos a saber en todo momento lo que está sucediendo en la vivienda, ya que las imágenes se pueden visualizar a través de cualquier dispositivo electrónico. Una web para conocer todo lo necesario sobre las cámaras de vigilancia y escoger la que mejor se adapta a nuestras necesidades. 

La okupación en España

La indefensión que sufren las personas para echar a los okupas, la lentitud de la Justicia española y la tolerancia frente a este negocio que muestran muchos ayuntamientos son algunas de las razones que están propiciando el incremento de la ocupación en nuestro país. 

Barcelona, Sevilla, Madrid, Toledo, Málaga y Almería son las ciudades españolas en donde el fenómeno de la okupación se ha radicalizado. Las situaciones que se han vivido en muchas de estas poblaciones entre vecinos y okupas casi rozan el surrealismo, sobre todo si tenemos en cuenta el desamparo legal que se sufre ante este fenómeno sociológico. 

Sin ir más lejos, la nueva ley de desahucio exprés que prometía desalojar a los okupas en pocos días tan solo se aplica a los inmuebles de particulares y administraciones públicas. Muchas son las empresas y locales comerciales que se han visto afectados sin que los propietarios hasta el momento no hayan podido hacer nada. 

Las mafias organizadas se han asentado en nuestro país. Estas se dedican a okupar viviendas, muchas de ellas vacías al estar en manos de bancos e inmobiliarias, para luego revenderlas a particulares o exigir una mordida a los legítimos propietarios por el hecho de haberlas abandonado en su momento. 

Estamos, por tanto, ante auténticos profesionales de la okupación. Lejos quedan ya aquellos primeros okupas que apenas conocían los intríngulis de este fenómeno. Las mafias ya vienen con la lección aprendida y se desenvuelven como pez en el agua en un asunto en el que los propietarios de las viviendas se ven totalmente desamparados por la ley. 

Las cámaras de vigilancia como medida disuasoria frente a los okupas

Es por todo esto por lo que en los últimos años se ha incrementado la venta de cámaras de vigilancia. La inversión en un aparato de este tipo puede resultar francamente muy rentable. Y no solo por las medidas de seguridad que ofrece, sino porque sus imágenes pueden ser una de las mejores pruebas que presentar a la policía en caso de okupación de nuestra vivienda. 

Las ventas se han disparado tanto en lo que respecta a las cámaras de interior como de exterior. Tanto un modelo como otro suelen contar con conectividad WiFi y diversas funciones y características. Solo habrá que atender a algunas de ellas para elegir la cámara de vigilancia más adecuada a nuestras necesidades. 

Las cámaras de vigilancia pueden ser fijas o móviles, pudiendo estas últimas llegar a grabar la imagen a unos 360 grados. Las cámaras móviles suelen estar en los últimos años entre las más demandadas, por lo que pueden ser una opción más que recomendada. 

Puede resultar interesante, por ejemplo, que la cámara disponga de un servidor con sistema de descarga de las grabaciones de imágenes. Este servidor nos va a permitir que podamos descargar una grabación incluso si han desconectado la cámara. 

Por otro lado, la mayoría de cámaras de vigilancia ya vienen con función de visión nocturna, sobre todo las de exterior. Asimismo, también hay cámaras que poseen un micrófono incorporado para poder grabar el sonido de todo lo que sucede. Algo que nos puede venir muy bien a la hora de aportar pruebas a la policía. 

Lo cierto es que una cámara de vigilancia es una de las mejores opciones que tenemos para tratar de hacer frente al fenómeno de la okupación. Un dispositivo con el que vamos a poder proteger nuestra casa y saber en todo momento lo que ocurre en ella. Pero, a su vez, nos va a permitir grabar cualquier incidencia que suceda en el interior o en el exterior. 

Solo hay que recordar que expulsar a un okupa que lleva en una vivienda más de 48 horas es muy complicado. Si actuamos rápido gracias a la cámara de vigilancia, vamos a poder tener muchas más posibilidades de recuperar nuestra propiedad. 

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