SANTIAGO. Harvey Weinstein, Steven Seagal, Jeffrey Tambor, Kevin Spacey, a todos estos nombres, sinónimos de poder en la cúpula cinematográfica de Hollywood y de estar acusados de agresión sexual, se suma uno nuevo: John Travolta.
El medio Radar Online hacía público este lunes un informe en el que se recogía una denuncia contra el protagonista de Grease por acoso sexual por parte de un masajista de 21 años. Los hechos de los que se le acusa se remontan al 2000 y tuvieron lugar en Hotel La Quinta en Palm Springs, California.
El actor acudió al spa del complejo para recibir "un masaje corporal profundo". El trabajador "le preguntó a Travolta en qué área del cuerpo quería que se concentrase más, y Travolta le contestó que las nalgas", según apunta el texto.
Durante el masaje el actor "fue quitándose la toalla que cubría esa área y exponiendo sus nalgas", una actitud que reprobó el denunciante diciéndole que aquello era "inapropiado"y le colocó la toalla en su sitio.
Insinuaciones que continuaron en la sauna, a la que le pidió que le acompañase para no estar solo
Acto seguido, Travolta le dijo al joven que "era muy atractivo" y "le había excitado". Insinuaciones que continuaron en la sauna, a la que le pidió que le acompañase para no estar solo. Allí el actor se quitó de nuevo la toalla y "le preguntó si quería ver algunas de las técnicas de masaje que más le gustaban", recoge el informe. El trabajador se tumbó boca abajo y notó como su mano tocaba el interior de su muslo.
En ese momento se sintió muy incómodo y decidió abandonar la sauna en dirección a la ducha, un trayecto en el que le siguió Travolta para preguntarle "si quería que le enjabonase la espalda".
Una propuesta a la que se volvieron a sumar "comentarios obscenos" cuando el joven regresó a la sala de masaje.
El trabajador del spa decidió denunciar al actor tras sentirse "violado" y aseguró al oficial Mark Peters, encargado del caso, que no le había dado "falsas esperanzas" al actor.
Sin embargo, la denuncia no prosperó al considerar que lo ocurrido "no cumplía los requisitos para considerarse acoso sexual". Además, el actor ya había abandonado el complejo y "ninguno de los actos o declaraciones" podían corroborarse.
