Todo lo que necesitas saber para hacer de tu casa un lugar para el trabajo

Adoptar nuevos hábitos, establecer horarios y crear un espacio propio para trabajar con mobiliario específico son prácticas indispensables para lograr la productividad y eficiencia deseada
Unha oficina

El teletrabajo es una práctica que lleva tiempo instaurándose en nuestro país y sus beneficios han sido respaldados desde numerosos organismos e instituciones. Sin embargo, no ha sido hasta el estallido la crisis sanitaria del COVID-19 y la obligación imponer el teletrabajo en las empresas donde una tarea pueda ser susceptible de ello cuando se ha puesto de manifiesto que la implantación del trabajo desde casa es factible y viable.

Entre los motivos que permiten el trabajo, según el último informe de OIT-Eurofound, destaca el desarrollo, implantación y uso de las modernas tecnologías de la comunicación. Del impacto de las TIC también se hace eco el estudio Working anytime, anywhere: The effects on the world of work (Trabajar en cualquier momento y en cualquier lugar: consecuencias en el ámbito laboral) que recopila datos de 15 países, entre los que se incluye España.

Este estudio recoge una serie de factores positivos del teletrabajo. Entre estos se encuentran los de ofrecer una mayor autonomía sobre el horario de trabajo, algo que permite organizar la jornada laboral con más flexibilidad, y un menor tiempo de desplazamiento al lugar de trabajo. 

Estos dos factores "mejoran el equilibrio entre la vida laboral y personal, y una mayor productividad", especifica el estudio. No obstante, el estudio también incide en que el teletrabajo puede generar desventajas como la tendencia a trabajar más horas o la posibilidad de sufrir efectos efectos negativos sobre su salud y bienestar al no contar con mobiliario adaptado como son las sillas de oficina.

Por ello, vamos a recopilar una serie de aspectos a tener en cuenta para adaptar nuestra vivienda al teletrabajo y posibilitar crear un espacio productivo y eficiente que nos permite rendir más y mejor en nuestro día a día.

Crear un espacio específico

El primer paso que hay que dar es el de crear un espacio específico dentro de nuestra casa para el trabajo. Para ello, hay que habilitar un rincón o una habitación para desarrollar nuestra actividad profesional, de modo que cuando lo veamos lo asociemos directamente al trabajo. Para ello es necesario contar con mobiliario adecuado como son las sillas de oficina o mesas de trabajo.

Contar con este tipo de muebles no sólo nos va a permitir identificar el espacio sino que nos va a evitar problemas de salud como dolores de espalda. El material y mobiliario de oficina son aspectos indispensables para una buena salud laboral, así que no te lo piensas y adquiere productos de calidad.

Tómatelo en serio

El teletrabajo no es tener más tiempo libre ni unas pequeñas vacaciones. Es una forma de trabajar en la que el profesional no está en la oficina. Pero eso no quiere decir que tenga que cogerse algunas licencias para trabajar menos horas o distraerse más. Así que hay que tomárselo en serio y esforzarse por cumplir cómo si uno estuviera en el despacho y tuviera al jefe supervisándolo físicamente.

Organiza y gestiona horarios

Una de las grandes ventajas que tiene el teletrabajo es la flexibilidad de horarios. Debido a ello, es una de las prácticas más aprovechadas por los empleados que practican el teletrabajo para poder conciliar su profesión con la vida personal. Para conseguirlo es clave organizar los horarios y crear unos hábitos estrictos para poder cumplir con las tareas diarias.

Fomenta el compañerismo y el contacto

No estamos en la oficina. Es cierto. Pero eso no es excusa para perder el contacto y la comunicación con el resto de compañeros. Hoy en día la tecnología permite mantener una comunicación ágil y eficaz a través del teléfono, el email o las videoconferencias. Compartir información y hablar, además, incrementan la productividad y la creatividad. Así que no te aísles en casa y mantén el diálogo con el resto de compañeros.

Separa vida personal-ocio de tu vida profesional

Has creado tu espacio profesional con su mobiliario de oficina adaptado a las necesidades. Excelente. Pero no caigas en el error de mezclar vida personal, ocio y vida profesional. Cuando tenemos todas estas opciones en un mismo recinto, nuestra vivienda, podemos correr el riesgo de mezclarlas, no distinguirlas y llegar a convertirnos en adictos al trabajo. 

Mantén y crea nuevos hábitos

El trabajo desde casa va a implicar adoptar una serie de hábitos que nos ayuden con nuestros objetivos diarios. Un error frecuente entre los primerizos es el de no vestirse para trabajar en casa. Grave error. Está demostrado que mantener hábitos como el de ducharse antes de ir a trabajar, arreglarse o performarse ayudan a incrementar la productivo en el trabajo a distancia.

Además de mantener hábitos también será recomendable adoptar nuevas prácticas. Una de ellas es la de hacer descansos recurrentes cada hora, aproximadamente, para despejar la mirada o hacer estiramientos. Por diferentes motivos no solemos hacerlos en la oficina, por lo que el teletrabajo es una buena ocasión para ponerlos en marcha.