Opinión

Ecos de conspiración

SERVICIOS SECRETOS vinculados a la derecha española de VOX mantienen que el papel de Alemania en el caso Puigdemont «ha obedecido a motivaciones geopolíticas». Energía e inmigración, dicen, están al final del oscuro callejón. Tras el boicot ruso a Europa, Berlín se está construyendo un gasoducto de 12.000 millones de euros para no depender del gas ruso ni del argelino que llega a través de España. Según parece eso explicaría la contribución de la decisión judicial sobre el prófugo a la inestabilidad en España, que con el cambio político (dicen esas fuentes) convierte a nuestro territorio en «un país esponja de la migración ilegal», ya que Turquía e Italia fallan a los intereses germanos y europeos. Parece descabellado, y más cuando «se vinculan los votos de la moción de censura en España». Los servicios secretos de la Guardia Civil, apuntan desde esta garganta profunda, han tenido conocimiento «del paradero de Josu Ternera en el sur de Alemania para ser tratado de cáncer». Lo preocupante es que algunos piensen que «los votos de Bildu» estuvieran condicionados a ignorar al etarra huido y los votos separatistas a no extraditar a Puigdemont.

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