Opinión

Malsomni català abans de nadal

Pasó la romería y ya podemos ir asumiendo que, como era previsible con cualquier resultado, se va a seguir yendo todo al carajo porque es el género que trabajamos. Tortilla de patata, changurro, crema catalana y digestión pesada. Lo único positivo es que podemos ir guardando las banderitas. Todas. Vamos ya llegando tarde a lo de poner el Santa Claus escalador, ese que parece que va a entrar en casa por la ventana, pero no para dejar un regalo sino para robar como un gobierno central o autonómico cualquiera. Pintemos ya las ventanitas con nieve falsa y pongamos las lucecitas de bazar que, por un mero milagro de Navidad, casi nunca se cortocircuitan prendiendo fuego a las cortinas. Al menos, cambiemos un rato el crimen estético del chovinismo de feria eterna de la senyera y la rojigualda por el crimen estético de la temporada.

¿Habrá otra DUI?, ¿se frenará el procés tras la espantada empresarial y la moderada bajada de los independentistas? Para responderles, nada mejor que recordar lo que dijo el recientemente fallecido Chiquito de la Calzada cuando le preguntaron, buscando una respuesta seria, si creía que había vida en otros planetas. "No lo sé", dijo, "pero seguro que hay Fanta y Coca-Cola".


*El titular significa "Pesadilla catalana antes de Navidad"