Opinión

El 26-A y el 26-M

LA DOBLE vuelta electoral de abril y mayo nos deja algunas reflexiones sobre la política gallega. PP: se impuso en el 57% de los concellos y ganó en tres de las siete ciudades pero tiene desde hace tiempo un problema para conectar con el elector joven y urbano. PSOE: la política son ciclos y los socialistas parecen haber cogido la ola buena. BNG: sin llegar a parámetros del pasado, vive una etapa de crecimiento y recuperación que podría refrendarse en las autonómicas. En Marea/Podemos: en caída libre. Esa costumbre del rupturismo de airear en público sus problemas internos le pasó factura. Cs: su discurso no acaba de conectar con la sociedad gallega, como le había pasado a la UPyD de Rosa Díez. Vox: no logró entrar en ninguna corporación. Eso lo dice todo.

La veteranía es un grado
Salvo en el caso de A Coruña, donde una neófita como la socialista Inés Rey acaba de llegar y besar el santo, en general la veteranía cotiza al alza en política. Se ha visto en el caso de Sánchez Bugallo en Santiago o, más cerca, de Claudio Garrido en Sarria. Por no citar a Abel Caballero, Fernández Lores, José Crespo, José Tomé... Como diría un clásico: la veteranía sigue siendo un grado.

Comentarios