Blog | Estoy Pensando

Usted es de África

Actuación del coro Natumayini de Uganda en Lugo. EP
photo_camera Actuación del coro Natumayini de Uganda en Lugo. EP

PUES RESULTA que es usted un bereber. Los gallegos compartimos en gran medida nuestro ADN con los habitantes del Magreb, que como usted sabe lo conforman hoy los estados de Libia, Túnez, Marruecos, Mauritania y Argelia. Lo dicen las universidades de Oxford y de Compostela, y uno de los firmantes del estudio es el profesor Carracedo, de la Universidad de Compostela, una de las mayores eminencias mundiales en asuntos de ADN. La noticia ha causado enorme conmoción entre alguna gente que se creía descendiente de algún rey vikingo o de alguna sacerdotisa romana. Hay algunos que niegan la mayor, como si el ADN fuera algo que se pudiese elegir a capricho. Otros, más comedidos, se preguntan cómo pudo suceder y sobre todo cuándo pudo suceder. En época de dominación romana no parece muy probable. En Galiza hay hoy censados unos 3.000 castros. Entre esos y los que no están documentados, parece los romanos encontraron población suficiente como para no verse en la necesidad de importar mano de obra del Magreb. La época sueva y los siglos inmediatamente posteriores no están precisamente sobrados de fuentes, pero entre las pocas que hay no encontrará usted ninguna crónica que hable de una llegada multitudinaria de norteafricanos.

Sin embargo, somos originariamente africanos. Ni celtas, ni romanos, ni suevos ni visigodos.

"Pero si yo nunca he degollado a un cordero. Ni siquiera me gusta el cuscús", pensará usted. Da lo mismo. Con cuscús o sin cuscús, usted es africano o africana. No será necesario explicar que la cultura de un pueblo la conforman usos, costumbres y creencias. Con la de siglos que han pasado, este país, como todos, ha desarrollado su propia cultura, por lo que se ve muy alejada de sus orígenes, pero los orígenes siguen siendo los mismos.

Aún va a resultar que los celtas no eran celtas sino magrebíes

El caso es que es usted pariente de Gadafi, por ejemplo. Y de mucha gente que se sube a una patera para cruzar el estrecho de Gibraltar. En algún momento de nuestra historia, un montón de magrebíes llegaron a Galiza, acaso atraídos por nuestra famosa gastronomía, quizá por disfrutar de las banderas azules de nuestras playas, eso no lo sabemos. Tuvieron que ser los suficientes como para dejar en nuestro ADN un rastro mayor que el que dejaron los romanos, que estuvieron aquí más de seis siglos, o de los suevos, cuya presencia duró algo menos de doscientos años, tiempo suficiente como para llenar nuestro país de ADN.

Quizá los magrebíes llegaron antes que los romanos. Puede que mucho antes. Acaso los castreños eran realmente africanos en origen. Eso no lo sabemos. Ya lo estudiará la gente que sabe de estas cosas, que no somos usted ni yo, salvo que sea usted el profesor Carracedo, que lo dudo seriamente. Sería la única manera de encajarlo todo, ya que las crónicas irlandesas, concretamente la conocida como Lebor Gabála Érenn, escrita en el S. XI pero referida a tiempos muy anteriores, es la que nos da cuenta de las invasiones protagonizadas por Breogán y sus descendientes, con lo que aún va a resultar que los irlandeses también son africanos y los celtas no eran celtas sino magrebíes. De hecho, la citada crónica cuenta que los invasores galaicos eran un pueblo errante que tras una peregrinación de más de 400 años, tras pasar por Egipto, acabaron recalando y asentándose en Galiza. Lo lógico es pensar que, de ser cierta la leyenda, se hubieran detenido en el Magreb tras atravesar Egipto, dejando el Magreb perdido de ADN.

El caso es que uno debe saber siempre de dónde es, pero nunca está de más saber de dónde procede. Es probable que algo saquemos en limpio de todo esto. Por ejemplo, pensemos que cuando nos encontramos con un marroquí y le decimos aquello de: "Vuélvete a África, moro", el podría contestarnos exactamente lo mismo. Tenemos además la circunstancia de que, aunque el fenómeno se da en toda Galicia, es más notorio en el sur, y más concretamente en la provincia de Pontevedra, lo que demuestra que Rajoy también es primo de Gadafi y eso podría explicar el apego al poder que tenemos los gallegos como una característica genética.

Todo ello también explicaría, de ser cierta la crónica irlandesa que habla de los gallegos como un pueblo migrante, nuestra costumbre de esparcirnos por el mundo, de tal manera que si el profesor Carracedo vuelve a hacer su estudio dentro de 15.000 años, algo poco probable, pues no es precisamente un chiquillo, descubriría que todo el mundo desciende de los gallegos y por tanto, todo el mundo es de origen africano, algo que por otra parte es sabido desde hace tiempo, pues de allí salieron los primeros homínidos, algo que podemos constatar cada vez que vemos bailar a Georgie Dann, el mayor artista de todos los tiempos.

En fin. Si es usted, gallego y además es un racista xenófobo, que de todo hay en este mundo de Dios, sepa que con mirarse al espejo tiene sobrados motivos para hacer dos cosas: cambiar de ideas u odiarse a sí mismo. Yo le recomiendo lo primero, pero quién soy yo, un humilde africano, para dar consejos a nadie.

Comentarios