Opinión

Atraer y crear industria

LA CRÓNICA semanal de la economía gallega de Julián Rodríguez se ocupa hoy de un problema medular en Galicia: la inversión industrial, la necesaria potenciación del sector industrial. Lo descubre como carencia y necesidad en esta ocasión el cierre de Alcoa en A Coruña, con el consiguiente problema de empleo. Las declaraciones de que el Gobierno busca inversores para ocupar las plantas que Alcoa —¡ojalá se cumpliese ese milagro!— no deja de ser, nos tememos, un mensaje político demasiado rápido, fácil, de circunstancia y sin mayor consistencia.

En la mejor de las hipótesis, no deberían generarse esperanzas solo con buenas intenciones a quienes están en la puerta del paro. Sería exigible, y ojalá sea así, una sólida base real para que esa inversión se produzca. En cualquier caso, con este problema se evidencia la ausencia inversora industrial, tanto por atracción del exterior como por generación de iniciativa y capital del propio país. Queda al descubierto con esos cantos la ausencia de una política de largo trazado para la creación de industria tanto en Galicia como en este caso en Asturias. Durante los años de la crisis se repitió que había que ir a otro modelo económico para España y para Galicia, en el que la producción de bienes  de consumo y la capacidad competitiva en los mercados exteriores dominasen.

De aquella situación negativa se ha salido, en las grandes magnitudes al menos, pero los diseños y las estrategias de la política económica no han cambiado de forma significativa. No se puede esperar a la llegada del lobo, como en este caso con el cierre de dos plantas de Alcoa, para anunciar que se trabaja en la busca de inversores industriales. Se necesita tejido industrial y para ello generar las condiciones, que esa es la tarea básica de la política y no la primacía de los gestos y los símbolos en el debate y en la acción de la responsabilidad política.

Comentarios