Mayte Gutiérrez, de AGH2: "Galicia puede ser una potencia en el hidrógeno: tiene sol, viento, agua y tejido tecnológico"
¿Cómo le explicaría a un profano qué es el hidrógeno verde?
El hidrógeno verde es un vector energético, que no es lo mismo que una fuente de energía, que sirve para almacenar la energía y poder utilizarla cuando existe demanda. Y es capaz de sustituir a los combustibles fósiles y no emitir gases de efecto invernadero. ¿Qué ventajas tiene? Favorece la descarbonización, no contamina y a medio o largo plazo facilitará que los territorios no tengan dependencia energética como ocurre ahora. El hidrógeno verde se genera a partir de renovables como el aire, sol y biomasa, y esto da autosuficiencia a los territorios. Por esto mismo, cuando esté consolidado, abaratará considerablemente el precio de la energía y la factura de la luz.
Esta misma semana, la Asociación Gallega del Hidrógeno publicaba un mapa con una treintena de proyectos en distintas fases de desarrollo en Galicia. ¿Somos una de las comunidades mejor posicionadas para ser un hub del hidrógeno?
Sin duda. Lo somos porque Galicia cuenta por sí misma con todos los aspectos favorecedores para el desarrollo del hidrógeno. Dicho de otra manera, en Galicia hay viento, y de hecho es una de las regiones con más parques eólicos de toda España, con 192 en operación y una lista larga en tramitación; tenemos agua, porque es una región donde llueve mucho, y contamos con un tejido tecnológico importante que además está promocionando una cantidad de proyectos nada despreciable. Por tanto, tenemos todos aquellos aspectos que pueden hacer fácil el desarrollo del hidrógeno.
¿Cómo ve el grado de implicación de las administraciones, clústeres y empresas?
La industria gallega ya ha demostrado que está enormemente implicada y se ve en el número de proyectos en marcha y en fase de desarrollo. Las administraciones también lo están, pero es verdad que les toca gestionar la parte más difícil, que es la regulación y las herramientas financieras. Entonces, la velocidad de crucero no es la misma, pero en general hay una implicación importante por parte de todos los actores.
Dentro de Galicia, ¿Punta Langosteira y puerto de Vigo comandarían esta 'revolución' del hidrógeno?
La concentración de proyectos de calado se da sobre todo en el entorno de A Coruña. Pero los puertos en general son una vía de exportación y de importación muy importante, tanto en A Coruña como en Ferrol o Vigo. Los puertos son auténticos embajadores de este tipo de vector energético.
También hay varios proyectos en zonas más despobladas del interior gallego, como Guitiriz y Aranga, donde Eólica de Cordales proyecta una planta a la que ya ha mostrado su oposición la Sociedade Galega de Historia Natural (SGHN). ¿Temen que surjan movimientos contrarios que puedan torpedear el hidrógeno como estamos viendo con la eólica?
Cualquier proyecto industrial en este momento tiene contestación social. Sin embargo, queremos resaltar los poquísimos o ningún problema que provoca el hidrógeno al entorno: no genera residuos, solo vapor de agua; no genera ruidos y no tiene contaminación lumínica. Quizás la única limitación es el agua, y no es nuestro caso en Galicia, porque vamos sobrados de agua.
A Galicia le vendría de perlas el corredor de hidrógeno Zamora-A Coruña, que pasa por Guitiriz. ¿En qué fase está el proyecto?
En la primera convocatoria del corredor, llamado H2Med, Galicia no entró. Desde entonces hemos trabajado intensamente con Enagás para que en esta segunda convocatoria sí consiga entrar. Para ello se necesita demostrar que Galicia tiene suficientes proyectos y que estos tienen vocación europea. Y los tenemos, por lo que confiamos en entrar. Esto se sabrá entre junio y septiembre, calculo.
¿Hay fondos europeos para implantar el hidrógeno?
Sí, y muchos además. ¿Cuál es el problema? Que no son fáciles, ni ágiles ni continuos, sino que van escalonados. Entonces solo pueden ser aprovechados, en general. por empresas grandes que tienen músculo económico porque hay que esperar a los plazos.
Hablemos de movilidad. El frenazo del vehículo eléctrico está avivando el debate sobre el coche a hidrógeno. De momento en España solo se venden el Hyundai Nexo y el Toyota Mirai. ¿Está verde todavía el coche de hidrógeno?
La hoja de ruta del hidrógeno, la nacional y la europea, prevé tres ejes prioritarios: el primero es la industria, el segundo es la movilidad y el tercero es el consumo doméstico. Los dos últimos no tienen sentido si no hay un suficiente desarrollo en la industria. La movilidad llegará al hidrógeno, primero con el transporte pesado, como trenes, aviones y camiones, y luego al transporte ligero. Pero hasta que no esté verdaderamente desarrollada la industria y los proyectos energéticos no tengan suficiente excedente de hidrógeno para poder alimentar el suministro de las gasolineras, se retrasará.
Los coches a hidrógeno tardarán en asentarse porque primero hay que desarrollar la industria. Luego llegarán la movilidad y el consumo doméstico"
El hidrógeno verde tiene fama de inflamable. ¿Es peligroso?
Tiene sus características químicas y físicas que no son despreciables, pero hoy en día podemos utilizarlo minimizando los riesgos al máximo. No es nada que deba preocupar ni a la industria ni al usuario. Además se está considerando odorizarlo porque, ante riesgo de escape, no podemos verlo ni olerlo.
¿Por último, qué deseos le piden desde la Asociación Gallega del Hidrógeno al próximo 2025?
Que se dé continuidad a este apoyo público-privado, y a la sociedad, que tenga inquietud de conocer qué es el hidrógeno para tener una opinión propia y ver sus beneficios.