El precio de la vivienda acelera y marca su mayor encarecimiento en 18 años en Galicia
El precio de la vivienda sigue sin encontrar techo y, lejos que pisar el freno en el ritmo de subida, acelera. Tanto que ya se encarece a niveles previos al estallido de la burbuja inmobiliaria.
En Galicia, los pisos y casas subieron un 12,7% en el segundo trimestre del año en comparación con el mismo periodo de 2024, lo que supone el alza más intensa desde inicios de 2007, esto es, de los últimos 18 años. En los primeros compases de ese año, que marcó el inicio de la crisis financiera, había subido un 13,7%, según el índice que publica el Instituto Nacional de Estadística (Ine).
La vivienda encadena así tres trimestres seguidos con aumentos superiores al 10% en la comparativa interanual y va camino de sumar nueve años consecutivos de encarecimiento sin tregua.
Alzas en obra nueva y pisos usados
Los datos muestran un fuerte repunte tanto en la obra nueva como en los inmuebles usados. En concreto, la vivienda a estrenar se encareció entre abril y julio un 10,5% de media en Galicia, mientras la segunda mano se disparó un 13,1%.
En ambos casos son niveles récord de los últimos 18 años, de modo que habría que retrotraerse a la época del estallido del boom inmobiliario para encontrar aumentos más intensos.
¿Hay riesgo de otra burbuja?
En todo caso, diversos expertos coinciden en que no se está gestando una burbuja como aquella. Señalan que la financiación es más prudente, el nivel de endeudamiento de las familias más contenido y no hay un crecimiento desmesurado de la construcción.
En una reciente entrevista a este diario, el presidente del Consejo General de Economistas de España, Miguel Ángel Vázquez Taín señalaba que "el verdadero problema ahora no es un auge especulativo, sino que mucha gente no puede acceder a una vivienda por falta de oferta y precios fuera de su alcance".
Precisamente el déficit de pisos en el mercado para atender la demanda alimenta su encarecimiento y contribuye a agravar una crisis habitacional difícil de resolver en el corto plazo.
Una demanda creciente
Pese a lo caro que resulta adquirir una vivienda, aspectos como el abaratamiento de las hipotecas al calor de la bajada de los tipos de interés o el hecho de que en la actualidad resulte, en muchos casos, más barato comprar que alquilar, calientan la demanda, a la que contribuye factores como el aumento de los flujos migratorios y el auge de los hogares unipersonales o un mayor interés en la compra como inversión o por parte de los extranjeros.
"Se estima que cada año se necesitan alrededor de 240.000 viviendas para satisfacer la creación de nuevos hogares, pero el sector solo produce unas 100.000 unidades nuevas", advierte la portavoz de Fotocasa, María Martos.
Ante esta presión, los portales inmobiliarios augura que el encarecimiento de los pisos se acelerará aún más este año, sobre todo en las grandes capitales y zonas costeras que tienen una gran capacidad de atracción.