La asignación de las posibilidades de pesca para la flota comunitaria siempre deja luces y sombras para un sector como el gallego, con intereses en diversos caladeros y especies. Los totales admisibles de captura (TAC) y cuotas cerrados este martes en Bruselas para 2024 son satisfactorios, o al menos asumibles, para el grueso de los barcos —especialmente si se compara con el resultado de otros años—, salvo excepciones como las de jurel de Fisterra hacia el norte, el abadejo del Cantábrico o la cigala en algunas áreas, que marcan los puntos negativos para la flota de litoral de la comunidad.
En cambio, uno de los aspectos más positivos para este segmento es el aumento del 10% en la cuota de merluza sur. Es la mejora que ya había propuesto Bruselas a finales de octubre siguiendo las recomendaciones de los científicos y que este martes confirmó la cumbre pesquera en la que se fijaron las posibilidades de extracción en aguas de competencia exclusiva de la Unión Europea, la más maratoniana de los últimos tiempos: comenzó el domingo y el acuerdo se hizo esperar hasta ayer por la mañana tras una noche en vela.
Al término, el ministro de Pesca, Luis Planas, valoró especialmente esa subida para la merluza sur. "Son 11.000 toneladas, la cifra más importante del siglo", alardeó. Cabe recordar que, tras años de recortes, Bruselas cambió su política con esta especie en la recta final de 2022 tras detectarse un error en el modelo de cálculo de la biomasa, con lo que el estado del stock era mucho mejor de lo estimado. Así, ya la cuota para este año había aumentado un 10,3%.
La flota de litoral también contará con más toneladas de rape (+7%) y gallo (+11). ¿Y qué ocurrirá con el jurel? Los escenarios vuelven a ser muy diferentes para los barcos que lo capturan de Fisterra hacia el sur, que ven incrementarse otro 5% una cuota que no llegan a agotar, y aquellos que lo pescan desde Fisterra al Bidasoa, pues se mantiene el golpe asestado para este año y, de nuevo en 2024, solo contarán con una pequeña cantidad para capturas accesorias. Esto es: sigue prohibida la pesca dirigida, una decisión que perjudica especialmente a los cerqueros. Informes aportados por la Xunta cifran el impacto en 11 millones de euros. Su petición de que se realizara un análisis por zonas de la situación del recursos para permitir abrir la pesquería en algunas áreas cayó en saco roto.
Abadejo
Adverso también es el panorama con el abadejo del Cantábrico ante el tijeretazo del 53% en las posibilidades de pesca, que como novedad tendrán carácter bianual. En lo que respecta al abadejo que se pesca en aguas francesas —una de las cuestiones que dilató la negociación—, finalmente se optó por fijar un TAC provisional para el primer semestre de 2024 de 500 toneladas a la espera de fijar un cupo definitivo para el año.
Eso sí, se acordó prohibir la pesca recreativa de esta especie entre enero y abril y limitarla a dos piezas por día a partir de entonces.
Otro de las sombras del acuerdo afecta a la cigala, pues el acuerdo confirma el tajo del 27% para esta especie en la unidad funcional 31, situada frente a la costa asturiana y con interés para barcos mariñanos, y prolonga su cierre en la área funcional 25, situada en el extremo noroccidental de la costa gallega, no solo en 2024 sino también en 2025, pues es uno de los TAC plurianuales fijados por primera vez para dar mayor previsibilidad y estabilidad a parte del sector. Otra de las especies a las que se aplicarán y que sufre una reducción de cuota es el lenguado, del 17% en aguas ibéricas.
Gran Sol
Antes del cónclave de ministros de Pesca de los Veintisiete, la suerte ya estaba echada para la flota del Gran Sol tras el acuerdo que adoptaron la semana pasada la UE y Reino Unido para los stocks compartidos. La cuota de merluza en esas aguas se verá mermada un 12,5% el próximo año. Se trata de un caladero y de una especie de enorme importancia para los pincheiros de A Mariña, pues supone en torno al 90% de sus capturas. Por eso, pedían mantener la misma cuota que este año. Los científicos basaron su recomendación en que en 2022 y 2023 no se lograron consumir todas las toneladas asignadas.
En aguas del norte también mejorarán ligeramente los cupos de gallo (+3%) y rape (+5%). Estas dos especies son especialmente relevantes para arrastreros de A Coruña y Vigo —donde más del 50% del valor del producto subastado en lonja corresponde a rape y gallo—. Con ese telón de fondo, desde la Cooperativa de Armadores de Vigo (Arvi), su presidente, Javier Touza, valoró como "satisfactorios" los resultados "generales" de esta nueva asignación del cuotas.
Por su parte, el gerente de la Organización de Productores Pesqueros del Puerto de Burela, Sergio López, señaló que el acuerdo no deja sorpresas sobre lo que ya esperaba el sector tras conocer las propuestas de Bruselas, con algunas de cal y otras de arena como cada año. Entre los puntos que dilataron la negociación estuvo la firme intención de Bruselas de reducir los días de pesca del arrastre en el Mediterráneo en un 9,5%. Finalmente se puede suavizar si se toman medidas de selectividad.
Mar ve el acuerdo "decepcionante"
"A negociación fracasou a pesar dos días de debate continuado e a Comisión Europea acabou por impor os seus criterios». Es el balance que la Consellería do Mar hizo este martes del acuerdo de TAC y cuotas sellado en Bruselas. El departamento que pilota Alfonso Villares lamentó que el resultado "apenas supuxo avances" frente a la propuesta inicial de Bruselas, de modo que "non da respuesta a boa parte dos intereses que Galicia depositaba" en la cumbre.
El político de Cervo esperaba más teniendo en cuenta que España ostenta hasta final del año la presidencia del Consejo de la UE. Pese a esa "oportunidade", Mar incide en que la delegación española no pudo revertir alguno de los recortes que preocupaban a la flota gallega. El conselleiro de Mar, que siguió el debate desde la capital belga acompañado por el director xeral de pesca, el también cervense Antonio Basanta, reprobó que la negociación «pecou de opacidade» y puso el acento en el resultado negativo para Galicia con el abadejo, el jurel o la cigala.
