Un espacio transformado

En el año 1984, dentro del contexto de un mercado automovilístico que nada tiene que ver con el de la actualidad, Renault causó sensación cuando se atrevió a sacar al mercado el primer monovolumen europeo, el Espace. Aquel coche fue el pionero en un segmento que en la siguiente década no hizo más que crecer y al que paulatinamente se fueron añadiendo nuevas marcas y modelos de distintos tamaños.

Pero el mercado cambia y en los últimos años el boom de los todocamino hizo que los monovolúmenes desapareciesen casi totalmente de las carreteras. El Espace no ha sido ajeno a esta evolución y, si bien en las últimas generaciones ya se apreciaba que sus formas iban acercándose cada vez más a las nuevas demandas del mercado, es en esta sexta generación cuando definitivamente se convierte en un todocamino, aunque sin perder las grandes virtudes que le hicieron ser un referente durante casi cuatro décadas en cuando a espacio interior, confort de marcha y modularidad del habitáculo.

Así, mientras que el primer Espace ofrecía un diseño que se parecía más al de una pequeña furgoneta, el que llega ahora al mercado es un auténtico SUV de siete plazas, que ofrece además un amplísimo equipamiento y acabados de lo más refinados.

Técnicamente, el nuevo Renault Espace —que realmente se perfila como el sustituto natural del Koleos— está desarrollado a partir de la plataforma CMF-CD de la alianza Nissan-Renault-Mitsubishi.

El nuevo Espace está disponible con una sola opción mecánica. Se trata de la combinación de un propulsor tricilíndrico de 1.2 litros y 130 caballos con otros dos eléctricos. Uno de ellos, capaz de propulsar el vehículo, ofrece 70 caballos, y el otro actúa como motor de arranque

Con una longitud de 4,72 metros y una distancia entre ejes de 2,34, el Espace ofrece un interior con tres filas de asientos, aunque también habrá versiones de únicamente cinco plazas.

Con los siete asientos ocupados, la capacidad del maletero se queda en 159 litros, mientras que con la tercera fila plegada, el volumen de carga puede variar entre 477 y 677 litros, dependiendo de la posición de la banqueta de la segunda fila, que se puede ajustar de manera longitudinal. Además, si se opta por utilizar únicamente los dos asientos delanteros, la capacidad de carga alcanza los 1.714 litros.

El puesto de conducción del nuevo Espace es idéntico al del Austral, lo que en si mismo resulta todo un elogio, tanto por ergonomía como por confort y calidad de acabados.

El cuadro de instrumentos ofrece abundante información sobre los parámetros de funcionamiento del vehículo a través de una pantalla de 12,3 pulgadas, que se complementa con otra táctil central de 12 pulgadas, que va colocada en posición vertical.

El sistema operativo, denominado OpenR Link, dispone de un buen número de funciones integradas como el Google Maps, entre otras, y además permite descargar otras apps, como una de juegos diseñada en exclusiva para el Espace, cuyo objetivo es hacer que los viajes en familia resulten mucho más entretenidos.

El puesto de conducción, prácticamente idéntico al del Austral, destaca por su alto nivel tecnológico. Llama la atención la gran pantalla central, situada en posición vertical, que aglutina todas las funciones multimedia.

La calidad de los elementos utilizados en el interior transmiten una excelente sensación, tanto a la vista como al tacto. Además, aquellas personas que buscan un mayor refinamiento pueden elegir el acabado denominado Espirit Alpine, con materiales y diseños más exclusivos.

En todo caso, sea cual sea el nivel de acabado, la realidad es que todos los ocupantes se sentirán inmejorablemente tratados, tanto por la calidad y comodidad de los asientos, como por espacio disponible tanto en altura como longitudinalmente. Otra característica que hace que el habitáculo resulte muy agradable es su luminosidad y es que el Espace dispone de un techo solar de casi un metro cuadrado de superficie.

El comportamiento en carretera está claramente orientado a conseguir el máximo nivel de confort para todos los pasajeros. Aún así, el tacto de dirección es muy bueno y, a pesar de sus dimensiones, es un vehículo que transmite suficiente agilidad, sobre todo, gracias a que su peso se reduce en algo más de 200 kilogramos con relación a la anterior generación.

La oferta mecánica del Espace se reduce a un único propulsor de tipo híbrido, que ofrece una potencia conjunta de 200 caballos. Este motor, de la familia E-Tech, recurre a un bloque  de combustión de gasolina tricilíndrico, que se combina con otros dos eléctricos, lo que le permite homologar unos consumos de 4,6 litros cada 100 kilómetros.

El próximo año se cumplirán 40 años del lanzamiento de la primera generación del Espace. Aquel modelo, con aspecto de pequeña furgoneta, fue pionera entre los monovolumen, pero hoy es ya un auténtico SUV.

Se trata de un propulsor muy agradable de utilizar, ya que en ciudad hay momentos en los que funciona en modo totalmente eléctrico, mientras que en carretera hace gala de una gran suavidad y baja rumorosidad.

La gama del Espace se completa con tres niveles de acabado. El más básico, denominado Tecno, ya cuenta con un completo equipamiento de serie en cuanto a elementos de confort y sistemas de ayuda a la conducción. Por su parte, el Techno Esprit Alpine añade el sistema de cuatro ruedas directrices —4Control— y volante de cuero específico, mientras que el tope de gama —Ionic— ya incluye elementos como el control de velocidad adaptativo, asientos delanteros calefactables o sistema de aparcamiento manos libres.

En cuanto a precios, el Espace está disponible en una horquilla que va desde los 42.195 a los 46.560 euros, con oferta de lanzamiento incluida. También se puede financiar desde 349 euros al mes.