El Gobierno cocina la jubilación reversible para volver al empleo, ¿en qué consistirá?

Un grupo de pensionistas en una plaza. EFE
Ultima una reforma para que las personas que se hayan retirado del mercado laboral puedan regresar si quieren con incentivos

El Gobierno prepara otra fórmula para que los ciudadanos trabajen y coticen durante más años a cambio de algún incentivo y siempre de forma voluntaria, con el objetivo de aliviar las tensiones del sistema público de pensiones. Se trata de una jubilación "reversible" que atraiga a quienes ya se han retirado a volver al mercado laboral transcurrido un tiempo. Esto es: a hacer el camino inverso para regresar al empleo desde la jubilación, codiciada por muchos y temida por otros ante el cambio de vida que supone. 

Fue el secretario de Estado de Seguridad Social, Borja Suárez Corujo, quien este martes avanzó desde el Congreso que el Ejecutivo trabaja para iniciar la tramitación de una reforma que permita hacer atractiva esa medida.

Explicó que no es una idea nueva sino que ya estaba encima de la mesa del ministerio que pilota Elma Saiz pero con otro nombre, el de jubilación flexible, que permite regresar al mercado laboral una vez causada la jubilación con un contrato a tiempo parcial. Suárez recordó que ya se había planteado a sindicatos y patronal tocar esa modalidad con la propuesta de trabajar más horas pero a cambio de aumentar la parte de la pensión percibida.

Pese a que la vuelta al empleo es una opción que ya contempla la ley, mediante un decreto de 2002, el secretario de Estado de Seguridad Social admitió que es "muy restrictiva" y "muy poco atractiva" para que los ciudadanos decidan volver al trabajo una vez que ya se han jubilado. "Creemos que hay un margen importante para establecer incentivos", afirmó. En todo caso, no ofreció más detalles.

Trabajar más años

Uno de los grandes objetivos de las últimas reformas en materia de pensiones impulsadas en España es elevar la edad real de jubilación en un escenario en el que el gasto que supone abonar las pagas públicas no deja de crecer y lo hará todavía más en los próximos años con el masivo retiro de la generación del 'baby boom'.

Entre las medidas activadas por el Gobierno está, por un lado, penalizar más las jubilaciones anticipadas voluntarias para reducir su uso y, por otro, reforzar los 'premios' para quienes opten por alargar su carrera laboral y aplazar así el cobro de la pensión. 

Más jubilación demorada

Con ese telón de fondo, el peso de las jubilaciones demoradas creció considerablemente. Si en 2019 suponían el 4,8% de las nuevas altas de jubilación, ahora representan el 11,4%. Esto contribuyó a que la edad media de acceso a la jubilación se sitúe en 65,2 años, frente a los 64,4 de 2019. 

Cabe recordar, además, que desde el pasado abril es más fácil acceder a la jubilación activa, que permite compatibilizar durante un tiempo determinado la pensión y la actividad laboral tras la jubilación. A esta modalidad se puede acceder con 15 años cotizados, sin necesidad de acreditar una carrera completa.