Cracks gallegas del futbolín
Un ejemplo de que el futbolín es un juego también de mujeres son Laura Varela (Arzúa, 1989) y Tania Pardo (Boimorto, 1993). Estas dos jóvenes descubrieron su pasión desde muy pequeñas, cuando aún no les llegaban "os braziños ás asas para xogar", cuenta Tania entre risas.
A raíz de empezar a jugar en el Café Bar Pedrito de Arzúa, estas dos amigas decidieron unir fuerzas y crear en 2021 un equipo que sigue siendo inseparable a día de hoy.
Cuando sus rivales hombres vieron su destreza y cómo les ganaban "algunha vez", confiesan cómplices, las animaron para que se apuntaran a los torneos.
"Realmente non coñeciamos nada deste mundo porque non se fala moito del e tiñamos certo medo a ir porque pensabamos que non chegabamos a ese nivel profesional", admite Laura, que añade que ellas mismas se sorprendieron al participar en su primer torneo en 2021 en la parroquia de Santa María de Arzúa, cuando un hombre de la organización del torneo de Lalín —que cuenta con unas 300 parejas— les dijo que tenían talento suficiente para inscribirse en ese certamen.
Hasta entonces, habían jugado siempre contra hombres o contra equipos mixtos, pero fue en ese momento cuando descubrieron que existía la liga femenina de futbolín.
También fue en uno de estos torneos lalinenses cuando ganaron el sexto premio.
Además, llevan años acudiendo al Máster de Rábade, que el año pasado no pudo aceptar más inscripciones al completar aforo, siendo uno de los más multitudinarios y antiguos de España.
Las dos jóvenes señalan que la participación es muy alta y que a torneos como este acuden personas de todas partes de España: "En Lugo hai un movemento de futbolín bastante grande coa Peña Bola Meiga, que organiza moitos eventos ademais do máster de Rábade".
Mujeres en el futbolín
Las jugadoras destacan que los participantes suelen ser en su mayoría hombres y que los premios cambian substancialmente de una a otra liga, siendo los de las mujeres mucho más pequeños.
Sin embargo, señalan que nunca han sentido "discriminación por ser mulleres".
"Hai un ambiente moi agradable, nunca se ven pelexas e a competitividade que se crea é moi san", constatan. Aunque, si recuerdan casos en los que algún "home pícase porque lle fastidia que lle gañe unha muller".
Cuentan también que "hai mulleres que se inscriben na liga masculina porque teñen máis posibilidades de obter un premio mellor, hai máis competencia e poden escalar máis alto. Nós sempre nos apuntamos na categoría feminina para que non se perda se nalgún momento non hai suficientes rapazas que xogan".
Observan, además, un detalle curioso sobre el que no mucha gente habrá reflexionado. Y es que los muñecos del futbolín siempre son chicos: "Gustaríanos que empezaran tamén a poñer algunha xogadora porque as hai e é importante que se vexan representadas".
Torneos propios
Hace dos años que Laura y Tania, además de jugar, también se animaron a organizar sus propios torneos en el bar Pedrito, en el que empezaron a aficionarse al futbolín.
Destacan que les gusta que los vecinos del pueblo conozcan este mundo y que se animen a probar a jugar en torneos, haciendo la misma labor que hicieron con ellas antes de su debut.
"No Pedrito xa se fixera un torneo facía moito tempo e nós estivemos encantadas de axudarlles a recuperalo. Os días antes, os participantes preguntábannos cantas parellas se anotaran, notábase que había gañas do campionato e viñeron persoas de todos os lugares da contorna, xa que pola zona non se fan moitos", explican las organizadoras, que destacan el mayor número de competidores de una edición a la siguiente, además de una mayor participación "de equipos de mulleres".
Ponen en valor las ventajas de este juego, ya que supone una forma sana de ocio y socialización.
Además, quisieron romper con el falso mito de que es una actividad que se ha ido perdiendo, pues creen que cada vez "hai máis persoas dentro do mundo do futbolín" en todos los rangos de edad: "Parécenos case coma otro deporte calquera no que se traballan aspectos como a psicomotricidade e os reflexos, no que se coñecen a moitas persoas e hai moi bo ambiente".
Y, aunque todavía está por confirmar, prevén organizar una tercera edición el próximo año con mucha ilusión y participantes.
Esperan responder también a las peticiones de los vecinos que quieren formar una liga arzuana de futbolín.
"Gústanos que a xente xoven se anime a vir porque ás veces, sendo moi bos, non se atreven a ir aos campionatos e, comezando por torneos pequenos, podemos animalos igual que fixeron con nós", afirman.
Aunque no tienen todo el tiempo que les gustaría para dedicarse a su afición, trabajan preparando el torneo de Melide, que tendrá lugar en el mes de septiembre y en el que seguirán representando a las mujeres dentro del mundo del futbolín.