Ni sal ni sedentarismo: los expertos dan las claves para evitar la insuficiencia renal

Riñones en una imagen generada con IA. FREEPIK
Más de 330.000 adultos gallegos padecen insuficiencia renal crónica, una patología "silenciosa" que en sus primeras fases es asintomática. Basta con una analítica de sangre y orina para detectar la enfermedad. En el Día Mundial del Riñón, los facultativos repasan los cuidados para evitar la ERC y abordan los factores de riesgo

Con motivo del Día Mundial del Riñón, que se celebra este jueves, 13 de marzo, el Sergas incide en la relevancia de la anticipación tanto en el cuidado de estos órganos como de la detección precoz de la insuficiencia renal, una patología que es silenciosa y que en su primera fase se manifiesta con escasos síntomas. 

Como explica la Consellería de Sanidade, la insuficiencia renal es una alteración de la función del riñón que limita la capacidad de eliminación de los productos tóxicos del organismo.

En un acto en Ferrol desarrollado por profesionales del área sanitaria y por representantes de la Fundación Alcer Coruña, el responsable de Nefroloxía del CHUF, Pablo Bouza, indicó que la enfermedad renal crónica (ERC) "representa uno de los principales problemas a nivel mundial" e incrementa el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, que constituyen la principal causa de muerte.

Una enfermedad "silenciosa" que afecta a uno de cada siete adultos en España

El aumento de los pacientes aquejados por esta patología implica un incremento del número de casos que alcanzan las etapas más avanzadas de la enfermedad, en las que el enfermo requiere de tratamiento de sustitución renal con diálisis o trasplante, lo que reduce su calidad de vida.

Los estudios indican que en España uno de cada siete adultos padece de ERC, una enfermedad "asintomática" en sus fases iniciales, por lo que más de la mitad de los afectados desconocen el problema que sufren, lo que limita las opciones de prevenir la progresión del cuadro clínico.

Si estos datos se extrapolan a Galicia se infiere que unos 330.400 ciudadanos pueden estar afectados. por un mal que, en sus estadios más graves, provoca que los riñones ya no filtren la sangre debidamente, de manera que el exceso de agua y los desechos no se eliminan del organismo.

Los expertos destacan que las expectativas de evolución del número de pacientes apunta a cifras "alarmantes" a nivel mundial debido al envejecimiento poblacional y al aumento de la prevalencia de patologías como la diabetes y la hipertensión arterial.

¿Cómo se pueden cuidar los riñones?

  • Los expertos que participaron en el acto de Ferrol pusieron el foco en la necesidad de evitar la obesidad, la hipertensión y la diabetes, que son consideradas enfermedades "estreitamente relacionadas" con la ERC.
  • Así, es básico adquirir "hábitos saudables" como una alimentación sana, rica en frutas, verduras y reducir el consumo de sal y de grasas saturadas.
  • Lo siguiente es evitar el sedentarismo realizando ejercicio físico adaptado a cada persona.
  • Otra clave es no fumar y limitar la ingesta de alcohol.
  • Y también es importante evitar, en la medida de lo posible, el consumo de fármacos con capacidad para dañar los riñones, como son los antiinflamatorios, que no conviene tomar sin supervisión médica.

¿Cómo se diagnostica la insuficiencia renal?

Los facultativos inciden en que resulta "moi sinxelo" pues basta con una analítica de sangre y con otra de orina para evaluar el nivel de "creatinina en sangre", esto es, nivel de filtrado glomerular, un marcador de la función renal, y la eliminación de albúmina en la orina, este marcador se denomina albuminuria.

Dado el carácter "silencioso" de la progresión de la insuficiencia, es clave que los pacientes que presentan factores de riesgo acudan a su médico de Atención Primaria al menos una vez al año a realizarse análisis.

¿Cuáles son los factores de riesgo?

El control es clave entre la población mayor de 60 años; pacientes con hipertensión; diabetes tipo 1 o 2; personas con enfermedad cardiovascular y también cuando se tengan antecedentes familiares de patología renal.

Además, deben estar vigilantes las personas con obesidad y aquellos con patologías autoinmunes como el lupus, la vasculitis u otros problemas urológicos por su capacidad para afectar a estos órganos.

En los casos más graves, la única solución es el trasplante. Este tipo de injertos son los más numerosos. En 2024, en Galicia se ejecutaron un total de 208, un 24% más que en 2023.