La falta de alumnos cierra siete unitarias en Galicia a partir de septiembre
A las puertas de agosto, la Xunta sigue con la planificación del próximo curso, que arranca el 8 de septiembre, y la Consellería de Educación reajusta el mapa escolar atendiendo a las dinámicas poblacionales, que pasan factura a un rural que pierde servicios.
Si en el año académico 2024-2025 echaron el cierre seis escuelas unitarias, en el próximo curso serán siete, según avanzó este miércoles el departamento que dirige Román Rodríguez, que apuntó como causa "a falta de alumnos". Ninguna logró alcanzar el mínimo de cinco exigido, una ratio que en 2024 se redujo desde los seis fijado hasta entonces.
Entre las escuelas afectadas figura la del concello menos poblado de Galicia: Negueira de Muñiz. El centro reabrió en septiembre de 2019 tras siete años sin actividad en la montaña lucense por falta de estudiantes.
En territorio coruñés, en Porto do Son echarán el cierre las escuelas de Queiruga y Seráns, al contar con uno y tres matriculados; en tanto que Vimianzo perderá el servicio en Castromil, con solo tres inscritos; en Arteixo dejará de operar la Escola Infantil da Lagoa, con cuatro estudiantes, y Muros también perderá su unitaria al contar con apenas tres alumnos. Son los mismos que tampoco dejan que la escuela de Romariz, en el concello pontevedrés de Soutomaior, pase la criba para el próximo curso.
En todo caso, la Xunta incide en que los 21 niños afectados ya tienen plaza en los colegios de referencia "máis próximos".
A falta de que el listado se publique en el DOG en próximas fechas, Educación incide en que la reducción del mínimo de alumnos permitió el curso pasado mantener operativas dos escuelas en San Cibrao das Viñas y en Boiro, que en el próximo curso incluso aumentan la matrícula.
Otra derivada es que, al reducirse la exigencia a cinco matriculados, en septiembre podrán seguir impartiendo docencia la Escola Infantil de Lamas, en Moraña, la del concello ourensano de Taboadela y el colegio de Ombre, en Pontedeume.
Inversión para reforzar las infraestructuras donde aumenta la demanda
En la otra cara de la moneda, Educación señala que está "a reforzar" infraestructuras educativas allí donde aumenta la demanda fruto de que continúa el éxodo hacia las ciudades y su entorno. Así, por ejemplo, Pereiro de Aguiar, en el área metropolitana de Ourense, suma un nuevo instituto, mientras que en Vigo están en licitación por 19 millones las obras del IES Domingo Villar y, en Ames, se ha adjudicado la construcción del nuevo CEIP do Milladoiro.
En esta línea, la consellería incide en que está en marcha la ampliación "doutros 18 centros educativos" en Castro de Rei, Caldas, Pontevedra, Redondela, Vilagarcía, Cambados, O Grove, Lalín, Arteixo, Fisterra, Oleiros, Santiago, Ourense y Xunqueira de Ambía.
La CIG llama a "avaliar individualmente cada situación" y UGT señala que "la natalidad impera"
Laura Arroxo, la secretaria nacional de CIG-Ensino, lamentó ayer que la consellería hiciese pública la reestructuración del mapa "sen consenso". "Estas decisións non se levan a ningunha mesa de negociación", explicó. La representante de la central nacionalista defiende que, antes de decretar "peches", la Xunta debería "avaliar individualmente cada situación". Entre "as moitas razóns" que, a juicio de Arroxo, deberían tomarse en cuenta figura que "o desprazamento deses nenos e nenas a outro colexio supoña moita distancia ou se se prevé aumento de matrícula" para el curso 2026-27.
Convencida de que mantener servicios educativos y sanitarios resulta "clave para ter un rural vivo", la representante de la CIG llama a la Xunta a "traballar na publicidade para manter aulas e colexios" en activo en el campo.
En cambio, José Cristóbal Salgueiro, de UGT, señaló que, a falta "de la comunicación oficial" por parte de la consellería, los cierres "parecen justificados", pues "el censo de la natalidad impera".