El Parlamento de Galicia acogió este martes el inicio de uno de los plenos ordinarios más largos de los que se tiene constancia en la historia de la Cámara autonómica, que, no obstante, en la primera jornada solo dio luz verde al inicio de la tramitación de una nueva norma legal.
De los cuatro textos legislativos sometidos a votación, únicamente recibió el visto bueno del legislativo gallego para continuar con los trámites la nueva ley de regulación del aprovechamiento lúdico de las aguas termales de Galicia promovida por la Xunta, que, con este trámite, supera las enmiendas a la totalidad presentadas por la oposición e inicia los trabajos en comisión de cara a su aprobación definitiva.
La iniciativa solo ha contado con los votos favorables del PPdeG, que ha defendido la propuesta del Ejecutivo autonómico de "proteger el uso terapéutico de los balnearios" y diferenciarlos del carácter lúdico de otros espacios termales.
Mientras tanto, la iniciativa legislativa popular para la gestión pública de los saltos y aprovechamientos hidroeléctricos en Galicia, así como las proposiciones de ley del grupo Común da Esquerda y del Grupo Mixto para, respectivamente, regular el juego y las casas de apuestas y reformar el Reglamento del Parlamento gallego para una mayor accesibilidad se han topado con la posición contraria a su tramitación por parte del grupo popular.
Este martes el pleno apenas se interrumpió a la hora de comer, y se prevé que la fórmula se repita el miércoles
Ese fue el principal contenido de las primeras horas de un pleno que arrancó con la elección mediante voto en urna de dos de los miembros del Consello Social de la Universidade de Santiago de Compostela, para después dar cuenta del informe anual del Valedor do Pobo correspondiente a su actividad durante 2018.
El saturado orden del día incluía una comparecencia de la conselleira de Educación, Carmen Pomar, junto con cuatro mociones, nueve proposiciones no de ley, tres interpelaciones, tres preguntas al presidente de la Xunta y once preguntas al Gobierno. Así las cosas, en su primera sesión el pleno apenas se interrumpió, desde su inicio a las 10 de la mañana, ni a la hora de comer, y se prevé que esta fórmula se repita este miércoles, jornada de conclusión.
Sesiones como la vivida este martes ponen de manifiesto la dificultad para alcanzar consensos entre todas las fuerzas con representación en la Cámara gallega y evidencian la distancia existente entre los planteamientos de los grupos de la oposición y el mayoritario PPdeG, cuyo voto no coincidió en ningún momento en la votación de los textos legales.
