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París despide las pasarelas

La capital francesa clausura la temporada de semanas de la moda reuniendo a lo mejor de lo mejor, con Saint Laurent, Lanvin o Dior

 A PRIMERA PARÍS FASHION WEEK se remonta a 1973, cuando con la intención de restaurar el palacio de Versalles se llevaron a cabo colecciones de alta costura. Desde entonces, el hito se ha mantenido hasta nuestros días. Chanel, Vuitton, Dior, Yves Saint Laurent... lo mejor de lo mejor se reúne en París durante la semana de la moda. Y con París finalizamos las semanas de la moda. Los franceses ponen el broche de oro con las mejores casas, muchas de las cuales nos han sorprendido con sus propuestas de otoño-invierno 2020/2021.

ModeloUN MAESTRO. La época de excesos, de musas y de un París eterno nos la trajo Yves Saint Laurent. Su propuesta para la próxima temporada [imagen central] nos ha hecho viajar hasta los años 70 y 80 para recordar su estética. Y el negro, la elegancia y la sastrería han estado presentes durante todo el desfile. Anthony Vaccarello nos ofreció un verdadero espectáculo con mangas abullonadas, abrigos de pelo en tamaño XXL y látex (sí, este material se convirtió en el protagonista del desfile). Así nos ha conquistado Vaccarello, con looks que delineaban con precisión la figura femenina.

MUCHO MÁS. En la ciudad de la luz, Dior se ha colgado el cartel de la mujer libre. La directora artística de la firma, María Grazia Chiuri, ha enarbolado en su propuesta la bandera del feminismo, invitando a los espectadores a la reflexión. La colección se llena de ponchos, abrigos, cadenas y botas de gamuza forradas de piel de oveja. Muchos de los looks se combinaban con medias de encaje hasta la rodilla con zapatos estilo Mary Jane. Durante el desfile se proyectaron frases como "Cuando las mujeres hacen huelga, el mundo se paraliza" o "la belleza femenina es una confección", de la italiana Carla Lonzi.

Lanvin es una de las casas de moda más antiguas y reconocidas de París, y ese toque que le hizo triunfar ha vuelto esta semana a la pasarela francesa. En una antigua fábrica de tapices, su director creativo, Bruno Sialelli presentaba su línea de otoño invierno. Una propuesta que bebía directamente del trabajo de la fundadora, Jeanne Lanvin, con vestidos de seda a media pierna bordados con pedrería, guantes de piel hasta el codo o abrigos de pelo. Un modo de celebrar los 130 años que cumple la casa de moda.

"Una línea muy pura con acentos de glamur". Así definía el diseñador de Rochas, Alessandro dell’Acqua, su propuesta, que será la última de las colecciones que lleve su firma en Rochas. En ella recuperó algunas de sus creaciones clave y escogió colores muy vivos (naranja, púrpura o celeste) para contrastar con los tonos tierra predominantes. Hubo muchas camisas bordadas, abrigos de satén con plumas, vestidos a media pierna o trajes de lana.