El Instituto Galego da Vivenda e Solo (IGVS) abrió este lunes el plazo de solicitud del programa de ayudas al alquiler, que oscilan entre el 30 y el 60% del importe de la renta mensual. En total, el presupuesto asciende a 20 millones de euros a repartir entre los años 2024 y 2025 y, aunque las demandas se pueden presentar hasta el 29 de febrero, se tramitarán por orden de presentación, por lo que conviene darse prisa.
¿Qué requisitos hay que cumplir para ser beneficiario?
El nivel de renta de la unidad de convivencia no puede superar tres veces el Iprem (8.400 euros en 14 pagas), esto es, 25.200 euros anuales. El tope se elevará a cinco veces el Iprem (42.000 euros) si se trata de una familia numerosa de categoría especial o cuando se viva con personas con una discapacidad de al menos el 33%. La vivienda debe ser residencia habitual, lo que habrá que acreditar con certificado o volante de empadronamiento. La ayuda se abonará al titular del contrato de arrendamiento.
Serán causas de exclusión circunstancias como que el inquilino tenga parentesco en primer o segundo grado con el propietario del inmueble o el hecho de ser dueño o usufructuario de alguna vivienda en España, salvo que, por ejemplo, se acredite la no disponibilidad del inmueble por separación o divorcio o por otra causa ajena a la voluntad del solicitante.
¿Se subvenciona cualquier alquiler?
No. El tope máximo es el mismo que se aplicó en 2022 a los solicitantes del bono alugueiro xoven: 600 euros. Es el baremo para A Coruña, Santiago, Pontevedra, Vigo, Lugo, Ourense y Ferrol. En la ciudad herculina y en la olívica estas referencias se han quedado un tanto desfasadas, pues en 2023 el precio medio del alquiler se situó en 618,7 y en 611,2 euros tras despuntar un 7,4 y un 8,8% con respecto a 2022, respectivamente.
El alquiler subvencionable se sitúa en 550 euros en una serie de concellos urbanos –como Burela, Cervo, Chantada, Monforte o Sarria– y, en el resto de Galicia se queda en 425 euros.
No obstante, la Consellería de Vivenda señala que estos límites se incrementan hasta en un 20% para familias numerosas o cuando se necesite un piso adaptado, de manera que la horquilla de la renta oscilará entre 510 y 720 euros, en función de la zona en la que esté ubicada la casa.
Y hay que tener en cuenta que el pago de la renta al casero debe realizarse mediante transferencia bancaria, pues habrá que presentar los extractos.
¿A cuánto asciende la ayuda?
Dependerá de los ingresos del solicitante o de la unidad de convivencia. Cuanto más bajos sean, evidentemente, más alta será la ayuda. Podrá llegar al 50% del alquiler para aquellos cuyos ingresos se sitúen entre 0,5 y 1,5 veces el Iprem, esto es, para los hogares en los que entren entre 4.200 y 12.600 euros. La subvención será del 40% de la cuota de arrendamiento cuando los recursos se muevan entre los 12.601 y los 21.000 euros. Con ingresos superiores, el importe se reduce al 30%.
No obstante, hay que tener en cuenta que la Xunta contempla incrementar en un 10% el apoyo a una serie de colectivos. Esto implica que la ayuda podrá cubrir hasta un 60% de la cuota a menores de 36 años; hogares monoparentales; personas inscritas en el Rexistro único de demandantes de vivenda autonómico con al menos un año de antigüedad; emigrantes retornados durante el año anterior a la convocatoria que residieran un mínimo de dos años fuera y familias numerosas. En este último caso, la ayuda tope puede llegar a 432 euros al mes.
¿Cuánto tiempo se cobra?
Tal como establecen las bases de la convocatoria publicada en el Diario Oficial de Galicia del 11 de enero, la ayuda se concederá anualmente y podrá cobrarse por un máximo de dos años. Eso sí, en 2025 tocará demandar la renovación aportando alguna documentación.
¿Cómo se solicita?
Las solicitudes deben presentarse preferiblemente online a través del formulario disponible en la sede electrónica de la Xunta. También se puede acudir presencialmente a un registro con los impresos cubiertos. En caso de que la petición formulada no reúna los requisitos exigidos, el IGVS se lo hará saber al solicitante, que tendrá diez días hábiles para subsanar los defectos. En total, la consellería tendrá tres meses para notificar la concesión o no del incentivo, que se abonará con carácter retroactivo. El silencio administrativo implicará que la petición ha sido desestimada.
El alquiler medio se disparó en Galicia un 40% desde 2014
Bajo el influjo de un stock que va a menos, los precios del alquiler se han calentado en los últimos años. En 2023, la renta media batió la barrera de los 500 euros, al situarse en 511,6. Los datos del IGVS reflejan que desde 2014 los inquilinos han tenido que soportar un incremento del orden del 40%. Entre 2022 –fecha del último dato disponible– y 2014, el salario medio bruto creció con mucho menos brío, un 15,9%, hasta 2.056 euros, según el Ige.
El 40% de los contratos de alquiler firmados en 2023 superaron los 500 euros al mes. En 2014 su peso no llegaba al 8%.
