Ligero y eficiente

El motor 2.0 e-Skyactiv X de 186 caballos dota al Mazda CX-30 de una mayor eficiencia.
Mazda
photo_camera Mazda CX30.

Desde que llegó al mercado, el Mazda CX30 se ganó una merecida reputación como uno de los mejores SUV de su segmento. Pero si en cualquiera de sus versiones este  modelo brilla a un buen nivel por comportamiento, diseño y calidad de acabados, es en el tope de gama donde alcanza su mejor nivel, sobre todo, desde la llegada del nuevo motor 2.0 e-Skyactiv X, que con 186 caballos no solo destaca por su potencia sino también por su eficiencia, gracias a una batería de 24 voltios que le permite lucir la etiqueta Eco de la DGT.

A este motor atmosférico se le han añadido, entre otros elementos, una inyección de alta presión y sensores en los cilindros. De este modo, con relación al anterior propulsor, la potencia pasa de los anteriores 180 a los actuales 186 caballos, mientras que el par máximo sube de los 224 a los 240 Nm.

Mazda1

Pero este despliegue tecnológico no solo sirve para incrementar su cifra de prestaciones —alcanza 204 kilómetros por hora de velocidad punta y acelera de 0 a 100 en 8,3 segundos— sino que también reduce los consumos hasta los 5,7 litros de media, según cifras oficiales.

En todo caso, esta cifra no dista mucho de la obtenida en la versión de pruebas que hemos tenido la oportunidad de conducir recientemente y en la que, después de unos recorridos que combinaron autovía y conducción urbana, el gasto de gasolina se situó en los 6,6 litros de media.

El motor que impulsa esta versión del Mazda CX-30 se muestra, en todo caso, muy cómodo y suave de conducir. Se trata de un automóvil con un funcionamiento muy suave y que entrega la potencia de forma muy progresiva a lo largo de toda la banda de revoluciones.

Estas sensación de confort y suavidad se ve potenciada gracias también a un cambio manual, de funcionamiento muy agradable y preciso, lo que hace que prácticamente no se eche en falta una transmisión automática, aunque esté disponible como opción.

Mazda3

El completo equipamiento de serie es otra de las virtudes de este modelo, sobre todo, en el nivel de acabado Zenith. Así, en cuanto a elementos de seguridad, destacan asistentes como el reconocimiento de señales, el aviso y prevención de salida de carril o el control adaptativo de velocidad. En cuanto a confort, el Mazda CX-30 también incorpora el acceso inteligente sin llave, sensores de lluvia y luz de cruce, cuadro de instrumentos con pantalla digital y, como ya viene siendo habitual en cuanto a conectividad, los sistemas de integración del teléfono móvil Apple Car Play y Android Auto.

Además, por 2.800 euros adicionales, el potencial comprador de este modelo puede optar al paquete denominado Black Safety, que incluye elementos como detector de fatiga con cámara, detector de tráfico delantero y trasero con frenada activa, monitor de visión de 360 grados o asientos delanteros calefactables.

Mazda2

Con todo ello, el Mazda CX30 se posiciona como uno de los modelos de su segmento más interesantes en cuanto a diseño y equipamiento, aunque su precio también se sitúa un poco por encima del de sus rivales más directos. En este sentido, el precio de esta versión se sitúa en 36.525 euros. En todo caso, la gama CX-30 está disponible en los concesionarios a partir de los 28.475 euros.

CONCESIONARIO EN LUGO

niponcar

Máis en Motor On