El textil gallego busca atraer empresas nuevas y necesita personal para las fábricas

Alberto Rocha y Javier Guerra.EP
El clúster del sector idea un fondo con aportaciones de las propias firmas para apoyar con capital ideas de negocio. Un grupo de pymes llamará a la puerta de grandes cadenas internacionales.

El clúster gallego de la moda (Cointega) está inmerso en hacer realidad el plan con el que aspira a fortalecer el músculo que ya tiene un sector de enorme tradición en Galicia que, además que contar con un coloso como Inditex y otras marcas cuyos diseños viajan a los armarios de muchos países, está conformado por empresas de pequeña dimensión pero mucho bagaje y calidad.

Uno de los objetivos en esa hoja de ruta es "generar nuevas vocaciones empresariales" dentro del sector en Galicia allanando el camino a aquellos emprendedores con ideas de negocio que puedan ser el germen de empresas de éxito.

Consciente de que el principal problema al que se enfrentan para hacer realidad sus proyectos es no contar con el dinero necesario, el clúster textil tiene sobre la mesa la idea de crear un fondo que nutran de forma voluntaria los propios empresarios del sector con aportaciones económicas para apoyar la materialización de nuevos proyectos entrando en su capital. 

Lo anunció este viernes el presidente de Cointega, Javier Guerra, en un encuentro en Santiago para presentar las líneas de trabajo en las que están inmersos. El empresario –que ocupó puestos destacados en firmas como Camper, Nike o Skechers y fue el impulsor de la marca El Niño– dijo que en la actualidad el textil "no es un sector que esté en el foco de la inversión". 

Recordó con nostalgia la década dorada de la moda gallega en los años 80, con el nacimiento de Galicia Moda, un movimiento que agrupaba a varias empresas del sector y que creó una imagen de marca que traspasó fronteras.

"Queremos retomar eso", afirmó Guerra, que citó ejemplos de jóvenes empresas españolas que están triunfando con propuestas que en muchos casos se centran más en la comercialización que en el trabajo de confección de la prenda. 

Dificultades para atraer trabajadores a las fábricas

Más allá de querer atraer empresarios, el sector, como muchos otros, afronta el reto de cubrir sus necesidades de personal. "No está siendo fácil atraer personas para trabajar tanto en el comercio como en la industria de la moda", señaló el secretario general de Cointega, Alberto Rocha.

Se necesitan profesionales sobre todo en la parte de fabricación, como perfiles relacionados con el manejo de las máquinas y los procesos técnicos, o patronistas. "Es un sector estigmatizado en la parte de la producción", reflexionó Rocha. 

También en el plano laboral hay "dos ligas", la de las empresas grandes y las pequeñas. "El talento migra muy rápidamente a las grandes porque gana más y siente que tiene más carrera profesional", explicó Rocha.  

Pymes en busca de posicionarse a nivel internacional

Las diferencias también son evidentes en el plano de la comercialización. Mientras compañías como Inditex, Adolfo Domínguez, Roberto Verino, Textil Lonia o Bimba y Lola tienen presencia física a nivel internacional, hay pymes que carecen de la dimensión necesaria para dar el salto al extranjero.

Un grupo de ellas están trabajando juntas para presentar su oferta ante los responsables de compras de grandes cadenas internacionales en busca de visibilidad y mercado para sus productos fuera. Se han seleccionado una serie de países objetivo, tanto en Europa como al otro lado del Atlántico. 

IA gallega para diseños y predicciones sobre el mercado

La transformación digital es uno de los retos que tiene por delante la cadena de valor textil-moda en Galicia. Las empresas grandes tienen músculo para dotarse de las últimas tecnologías, pero las de tamaño más modesto lo tienen más difícil.

Con ese telón de fondo, el clúster del sector trabaja de la mano con otro, el de las TIC en Galicia, para desarrollar sistemas de Inteligencia Artificial que permitan, por ejemplo, hacer predicciones de mercado sobre la demanda o trabajar sobre el diseño de la prenda para, entre otras opciones, cambiar su color o textura.