La enésima batalla entre Vigo y A Coruña

El puerto exterior de Punta Langosteira, epicentro de la nueva tormenta sur-norte en Galicia ▶ Desde la ciudad herculina piden al Gobierno que se condone la deuda, como hizo en Valencia

Un petrolero atraca en el puerto exterior de Punta Langosteira con la ayuda de varios remolcadores. EFE
photo_camera Un petrolero atraca en el puerto exterior de Punta Langosteira con la ayuda de varios remolcadores. EFE

ESTA VEZ no fueron las cajas —que ya no existen, aunque las heridas siguen abiertas, como se encargó de recordarle esta misma semana el alcalde vigués Abel Caballero a Elena Muñoz, portavoz municipal del PP y exconselleira, a la que acusó de silenciar un informe sobre la fusión—, ni las universidades, ni los aeropuertos, ni la atracción del turismo foráneo... Esta vez el conflicto llegó por el puerto de A Coruña, para quien tanto el regidor Xulio Ferreiro como la líder popular y conselleira Beatriz Mato piden un trato similar al de Valencia, al que le fue condonada una importante deuda por el Gobierno central. Pero desde Vigo no entienden esa reclamación, que supondría saldar "gratis" un "despilfarro" y además ignorar a la ciudad olívica, que no vería mal una "compensación".

Los titulares en portada de la prensa viguesa no dejaban lugar a dudas de que se ha desatado una nueva batalla norte-sur. O, mejor dicho, sur-norte, pues esta vez las hostilidades comenzaron a desatarse desde Vigo. "A Coruña quiere que el dispendio en Langosteira le salga gratis" y "una conselleira de la Xunta pide el perdón de la deuda de Langosteira pero nada de compensar al puerto vigués" son dos ejemplos de lo que se ha podido leer estos días en la portada de Faro de Vigo, diario que nunca ha dudado en ser un firme adalid de la ciudad olívica cuando considera que puede resultar agraviada.

Y es que en Vigo no parece haber sentado nada bien que Beatriz Mato o, conselleira de Medio Ambiente de la Xunta de Galicia, haya pedido al Gobierno de Pedro Sánchez igual trato para el puerto de su ciudad —en la que se perfila como candidata a la alcaldía— que para el de Valencia, de donde es originario José Luis Ábalos, el ministro de Fomento. Una reclamación por cierto que antes había hecho Xulio Ferreiro, alcalde de Marea Atlántica, a través de varios mensajes en su cuenta de Twitter en los que exigía justicia y coherencia con lo sucedido en el Levante, donde el Ejecutivo central acaba de aceptar que el Estado asuma una deuda de 350 millones de euros del Consorcio Valencia, que gestiona las remodeladas instalaciones portuarias.

Ni sentaron bien en el sur gallego las exigencias de la conselleira —realizadas en clave local y también preelectoral, en su condición de presidenta del PP herculino y más que probable alcaldable— ni que ningún otro miembro del Gobierno del presidente Alberto Núñez Feijóo haya salido a la palestra para exigir una compensación para el puerto de Vigo "si [finalmente] se le condonan 300 millones al de A Coruña".

Las costosas obras en Valencia fueron para poder acoger en su día tanto la Copa América de vela como la Fórmula Uno, mientras que en el caso de A Coruña el motivo de la creación del puerto exterior de Punta Langosteira fue alejar "los peligros de tener un puerto comercial en el centro de la ciudad", tal como recordó la propia Beatriz Mato en la rueda de prensa del lunes.

Mientras arrecia la polémica sur-norte por unas obras que en su día fueron calificadas por algunos de "derroche" similar al de la Cidade da Cultura, el Ayuntamiento de A Coruña pidió esta semana a la Autoridad Portuaria que convoque su consejo de administración para abordar "a necesidade de que o Estado condone a débeda asociada a Punta Langosteira, como acaba de facer en Valencia". El concejal Xiao Varela envió una carta al presidente del Puerto de A Coruña, Enrique Losada, en la que explica que es posible la condonación de la deuda y que es preciso actuar.