Galicia y Cantabria revalidan el frente común por la reforma de la financiación

La necesidad de presionar al Gobierno para pactar un nuevo modelo que dé solución a la "infrafinanciación" que afecta a todas las comunidades y la gestión del lobo centraron este viernes en Santander la reunión institucional que mantuvieron el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y su homóloga cántabra, María José Sáenz de Buruaga.

En una cita en la que ambos coincidieron en tachar de negocio "ruinoso" y "pésimo" la condonación de deuda ofertada por el Ministerio de Hacienda, que asciende a 4.010 millones en lo que toca al pasivo gallego y a 809 millones en el caso cántabro, ambos compañeros de partido suscribieron una declaración institucional para "renovar" y reafirmar "la plena vigencia" de la Declaración de Santiago, que en noviembre fr 2021 rubricaron junto a otras seis comunidades, alguna de diferente signo político, sentando las bases de una posición común para encarar el debate sobre el nuevo modelo de financiación. 

Al igual que hizo a mediados de enero con su homólogo aragonés, Jorge Azcón, Rueda sigue adelante con su intención de ratificar la vigencia del marco que también suscribieron Castilla y León, Asturias, La Rioja, Extremadura y Castilla-La Mancha, como base negociar con la Moncloa. "No queremos ser más que nadie, pero no vamos a admitir ser menos. No permitiremos que se nos trate como comunidades de segunda", advirtió el mandatario gallego, que celebró poder "reafirmar los principios" de hace tres años. 

El coste real de los servicios como base

Entonces y ahora se apuesta por un modelo de negociación multilateral, fundamentado en el coste real de los servicios públicos, la dispersión, el envejecimiento y la baja densidad poblacional. 

El mandatario gallego, que recordó la Conferencia de Presidentes celebrada en diciembre en Santander con Pedro Sánchez, se mostró crítico con que el Gobierno pretenda "consolidar un trato privilegiado" para Cataluña "a costa de los demás" territorios. 

En una comparecencia conjunta, Rueda ensalzó la gestión financiera de su equipo que, recordó, incluso fue objeto de reconocimiento esta semana por el gobernador del Banco de España y exministro, José Luis Escrivá. Y dejó claro que para Galicia lo prioritario es obtener al menos 500 millones adicionales en la reforma del modelo de reparto frente a los escasos 35 millones que, dijo, ahorraría la comunidad en el pago de intereses de la deuda con la condonación propuesta. "Galicia no va a admitir que con la quita se acabe el diálogo", zanjó. 

Puntos en común

Tras ensalzar las "raíces históricas, culturales y económicas" compartidas, la anfitriona incidió en que cántabros y gallegos "no entienden de fronteras" y defendió que las diferentes administraciones trabajen "juntas cooperando de manera leal y eliminando barreras". "No somos competidores, somos colaboradores", recalcó la mandataria, que defendió la "España de los esfuerzos comunes" frente al modelo de los que buscan "fracturar la sociedad y enfrentar a los territorios". 

Tras culpar a la "ambición" de Sánchez de adentrar al país "en un callejón sin salida" al "consagrar privilegios" para Cataluña a costa de "romper los valores constitucionales" sostén del modelo de "convivencia", Sáenz advirtió que ni Cantabria ni Galicia permitirán que el modelo de financiación sea decidido "por separatistas". "España somos todos y se nutre con los impuestos de todos", recalcó tras lo que llamó a "volver a la senda del respeto constitucional. 

Rotunda, la presidenta diagnosticó que "la inmensa mayoría de las comunidades" comparten que Cataluña no puede dejar el régimen común de financiación, un marco que toca actualizar, máxime cuando se han asumido competencias a cuenta de que el Gobierno de España "impone obligaciones sin financiación. El yo invito y tú pagas", espetó. Al igual que Rueda, constató que la quita "no es la solución" y reivindicó una financiación que tenga en cuenta la "solidaridad interterritorial" y que ningún territorio "vea empeorada" su situación de partida.

Objetivo común: mejorar el control y la gestión del lobo 

El segundo acuerdo de la cita fue la firma de un protocolo de colaboración para la gestión y el control del lobo después de que el miércoles se materializase su salida del Listado de especies protegidas (Lespre) a raíz de la modificación legal impulsada por el PP en las Cortes.

Sin descartar que otras comunidades se sumen, la hoja de ruta pactada por Sáenz y Rueda contempla intercambiar experiencias, crear una comisión mixta de seguimiento y compartir datos para evaluar las poblaciones y la efectividad de los sistemas de control.

"La buena noticia es que la pesadilla ha terminado. El lobo está fuera del Lespre", remarcó la cántabra mientras Rueda cifró en "una media de once" los ataques diarios registrados en Galicia. 

Regalos y carrera matutina

Haciendo gala de una buena relación institucional, el presidente de la Xunta obsequió a su anfitriona con una figura de un peregrino de Sargadelos, mientras Sáenz le entregó el libro de Beato ilustrado por José Ramón Sánchez y una lámina con la imagen de Santiago recogida en los Comentarios al Apocalipsis.

Tras destacar su "afecto" por Santander, Rueda confesó que aprovechó para salir a correr por el entorno del Palacio de la Magdalena de buena mañana.