Galicia intergeneracional: en el 26% de los hogares con niños vive también un abuelo

XXXI Encuentro Intergeneracional de Abuelos y Nietos de O Vicedo este noviembre. JM ÁLVEZ
La gallega es la segunda comunidad con más domicilios intergeneracionales, más frecuentes cuanto más vulnerable es el perfil socioeconómico

Los domicilios que comparten hasta tres generaciones de una familia son una realidad cada vez más extendida en España y, sobre todo, en Galicia. Los hogares españoles en los que viven menores de 16 años y que incluyen al menos un abuelo han crecido desde el 12% de 2020 hasta el 16% de 2024. Pero en la comunidad gallega es una estructura aún más frecuente, dado que hasta el 26% de estas unidades de convivencia son así. De hecho, solo se observan más en Canarias (31%). La tercera, Baleares, queda a un lejano 17%.

Los factores que lo explican son varios. Por ejemplo demográficos, como el elevado peso de la población mayor –casi el 64% de los habitantes de Galicia han llegado ya a la edad de jubilación, esto es, unos 1,74 millones de personas– y el aumento de la longevidad –la esperanza de vida gallega marcó un récord en 2024 al llegar a los 84 años–.

Pero también económicos, como la crisis habitacional: la Rede Galega de Loita Contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN Galicia) recalca en su informe anual que la vivienda "continúa a ser un factor de empobrecemento", en vista de que las personas en pobreza destinan un tercio de sus ingresos a costearla, que "o 5,1% da poboación de Galicia reside en fogares con falta de espazo" o que un 36,1% de quienes viven de alquiler están "en risco de pobreza" frente a un 14,8% de quienes son propietarios.

De hecho, la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), autora de este informe con datos de la Encuesta de Población Activa, incide en que el papel de los abuelos es "especialmente decisivo" en los hogares más vulnerables, al actuar como una "red de apoyo informal" que compensa "carencias estructurales del sistema de bienestar".

Abunda así en que solo el 12% de los hogares de dos padres con menores son intergeneracionales, una tasa que se dispara al 38% cuando hay un único progenitor. Y según EAPN, la pobreza afecta al 50,3% de los miembros de los hogares monoparentales en Galicia –o más bien monomarentales, puesto que "máis do 80%" están encabezados por mujeres–.

El estudio observa asimismo "una mayor tendencia" entre los inmigrantes: si son el 12% entre las familias 'autóctonas', en los emparejamientos mixtos suben al 18% y, entre los padres de segunda generación, al 20%. Se da la circunstancia de que la tasa de pobreza entre la población extranjera de Galicia es del 50,1% frente al 15,6% en los naturales del país. 

La piedra angular de las pensiones

Funcas recuerda que, tradicionalmente, los abuelos han ofrecido una fuente de apoyo material y logístico tanto para la crianza de las nuevas generaciones como para la vida cotidiana en general. 

En este sentido, las pensiones de jubilación y supervivencia son una piedra angular de muchas economías domésticas en Galicia: reducen la pobreza 59,5 puntos entre los mayores de 65 años, pero "tamén 9,2 puntos entre o resto da poboación", subraya EAPN. Y eso que, en 2024, el 47,4% de estas pensiones "non superaba o limiar da pobreza", al no llegar a 827 euros mensuales en catorce pagas.

Esta convivencia entre generaciones contribuye a aliviar la soledad no deseada, que amenaza más a los mayores. 

El factor de la pandemia

La Fundación añade que la pandemia de covid "parece haber actuado como catalizador" en el aumento de hogares intergeneracionales. 

Así, primero sirvieron para "atender cuidados o enfrentar dificultades económicas" y luego se han mantenido, "probablemente impulsados por la presión del mercado de vivienda, la inestabilidad laboral y la escasez de servicios de conciliación".