Prisión para uno de los dos detenidos por la muerte de un joven en Oleiros en una fiesta

Los dos arrestados por la muerte de un joven en Oleiros. LA OPINIÓN
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La jueza ha decretado este viernes prisión provisional comunicada y sin fianza para uno de los dos detenidos por presuntamente matar a un joven durante una fiesta de Nochevieja en Oleiros, según ha confirmado su abogado.

El otro detenido, un hombre de 33 años vecino de A Coruña, ha quedado en libertad y, según ha precisado el letrado en declaraciones a los periodistas, se le investiga por un delito de lesiones.

Por su parte, el hombre de 27 años, sospechoso por un delito de homicidio, ingresará en la prisión de Teixeiro, por lo menos hasta que se conozcan los resultados de la autopsia y se pueda determinar la causa de la muerte, pues según el abogado, esta prueba "es clave" en este caso.

Con todo, su cliente ha negado haberle dado a la víctima un golpe con un cenicero en la cabeza, pero, a pesar de ello, "el médico forense tiene que determinar si ese golpe ha sido suficiente" o si la causa del fallecimiento es otra, ha precisado este letrado.

Ambos, han pasado a disposición del juzgado de Instrucción número 2 de A Coruña este viernes sobre las 10:15 horas, investigados por la muerte de un hombre de 31 años que era vecino de Meicende, del municipio coruñés de Arteixo.

Por otra parte, el letrado del hombre de 33 años, Ramón Sierra, ha indicado en declaraciones a los medios que "es imposible" que la causa de la muerte fuese "un golpe con un cenicero que es de aluminio" y ha indicado que la víctima "posiblemente se diera con la cabeza al caer".

La víctima fue golpeada en la cabeza con un cenicero metálico, han informado fuentes de la Guardia Civil. No obstante, no se puede determinar que dicho golpe fuese la causa de la muerte hasta los resultados de la autopsia.

El hombre murió hacia las 6.00 horas del miércoles tras recibir el golpe durante una pelea entre dos grupos, en la que participaron unas siete u ocho personas, en un hotel en la zona de Bastiagueiro, donde se celebraba la entrada del Año Nuevo, una fiesta a la que asistían también familiares del fallecido.