Rueda informó a Feijóo de la denuncia a Villares la semana pasada

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, tras el Consello. DAVID CABEZÓN
El titular del Gobierno gallego y líder del PPdeG sostiene que cumplió los estatutos del partido "perfectamente" e incide en que no tratará "como culpable a quen a xustiza non declarou como tal"

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, volvió a defender este lunes la actuación de su Ejecutivo en lo que toca a la salida del que fuera conselleiro de Mar, Alfonso Villares, investigado por una supuesta agresión sexual. 

Después de que en los últimos días la forma de obrar del Ejecutivo autonómico se viese cuestionada tanto por la oposición como por algunas voces de la esfera judicial, como la fiscal de sala jefa de la sección Penal del Tribunal Supremo, Teresa Peramato, echando en falta que se explicitase el apoyo de la Administración gallega a la víctima, el mandatario y líder del PPdeG reiteró su confianza "na xustiza". 

El presidente recalcó que "no momento" en el que el procedimiento "entrou en fase xudicial", el que fuera alcalde de Cervo "renunciou ao cargo" a lo que siguió "a perda do aforamento". Con ello hizo referencia a que la dimisión se produjo después de que el martes, día 3 de junio, Villares --que en febrero acudió a la Comisaría de Policía Nacional de Ferrol a declarar de forma voluntaria por la denuncia interpuesta contra él por la exmodelo y presentadora Paloma Lago-- recibiese una notificación del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) trasladándole su condición de investigado. 

"A partir de agora, actuará a xustiza ordinaria", insistió Rueda, que recalcó que "nunca" tratará "como culpable a quen a xustiza non declarou como tal". 

En rueda de prensa tras la reunión semanal de su equipo, el mandatario tuvo que responder a varias preguntas sobre el caso, entre ellas una en relación con el pronunciamiento de la fiscal Peramato en una entrevista radiofónica en la que señalaba que "los abrazos" deben dirigirse a la víctima de violencia sexual y no a los agresores. Convencido de que "non é bo misturar unhas cousas con outras", el mandatario señaló que "a opinión dos que traballan na xustiza debe quedar na xustiza", en tanto que la de quienes lo hacen "na política" ha de enmarcarse en esa esfera. 

¿Cuándo se comunicó la denuncia al PP?

Preguntado por el momento en el que comunicó la situación al PP nacional, un asunto sobre el que este lunes puso el foco el secretario general del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, Rueda se limitó a indicar que se "cumpriron os estatutos" del partido "perfectamente e sen ningún problema". Luego, precisó que comunicó al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, la situación "cuando hubo un pronunciamiento judicial", esto es, la pasada semana, después de que Villares recibiese la notificación del TSXG. En todo caso, Rueda ironizó con que el tema "preocupe" a los socialistas "coa que lles está caendo". 

El líder del PPdeG se acoge a los supuestos especiales que regula el artículo 22 de los estatutos del PP --que hace alusión a los delitos de corrupción-- para defender que la dimisión de Villares y la solicitud de baja temporal del partido se dieron "tan pronto" se tuvo conocimiento de que el extitular de Mar fue "llamado a declarar como investigado en una instrucción judicial". 

Respecto al abrazo a Villares, volvió a justificarlo como una muestra de "agradecemento ao seu traballo" en los dos años en los que fue conselleiro. Y a partir de ahora, afirmó que es la justicia la que debe "actuar con todas as consecuencias". Rueda reiteró que confía "moito" en el sistema judicial, aunque aventuró que "os que intentan sacar sentenzas antes que a xustiza e os que sempre fan de xuíces pensarán o contrario". 

En un turno de preguntas en el que fue inquerido a respecto de la falta de mención a la víctima por parte de la Xunta y por la confianza en que se demostrará la inocencia de Villares, el titular de la Xunta insistió en que "os xuíces" son los que deben "pronunciarse de xeito obxectivo". En este punto, reflexionó a respecto de que si al final se "pode demostrar a inocencia dun compañeiro será unha boa noticia" y que si "non procede", la justicia habrá "falado" y no habrá "nada que dicir". 

A respecto de si la salida de Villares respondió a una decisión adoptada por el de Cervo o vino decretada por el Gobierno gallego, Rueda señaló que hubo consenso. "Estabamos dacordo Villares e eu mesmo en que era a decisión axeitada. Fixo o que tiña que facer", zanjó. 

Responderá en el Parlamento el miércoles

En cuanto a si comparecerá en el Parlamento para responder sobre la gestión de este asunto, señaló que el miércoles cuenta con someterse a las preguntas de la oposición en la sesión de control en O Hórreo, en la que da por hecho que "se falará destes temas". "É a miña obriga. Se queren preguntar, contestarei", indicó, aunque avanzó que no dirá "nada diferente". "Porque realmente, é o que sinto e é o que hai", señaló, para luego recordar que una persona sometida a juicio es "culpable" solo cuando "a xustiza o dictamina". Recordó que este es uno de los principios del "estado de dereito". 

Preguntado a respecto de si el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, al que el Supremo ha decidido procesar por revelación de secretos por la filtración de datos de la pareja de la presidenta de la comunidad de Madrid, debería mantenerse en su puesto al no existir todavía una condena en su contra, Rueda declinó establecer "paralelismos" con el caso Villares. Señaló que García Ortiz va a ser "enviado a xuízo" en el marco de un procedimiento que está más avanzado que el que afecta al exconselleiro. "Non ten nada que ver", recalcó Rueda, que puso en valor que la salida de Villares se adoptó "moitísimo antes de chegar a iso". "Os momentos procesais non son comparables", señaló el mandatario, convencido de que la situación del fiscal es "directamente insostible".