¿Basta una ración de pescado por semana en el comedor escolar? Expertos y sector responden
Inculcar unos buenos hábitos alimentarios en la infancia es una tarea que implica tanto a las familias como a los centros educativos, de ahí que el Ministerio de Derechos Sociales y Consumo se haya propuesto regular mediante un real decreto las pautas que han de seguir los menús que se sirven en los centros educativos públicos y privados que impartan infantil, primaria, educación especial, la Eso, bachillerato y ciclos de FP de grado básico o medio.
El texto fija los criterios mínimos que regirán la contratación de los servicios de comedor y cafeterías, además del contenido de las máquinas expendedoras, vetando la venta de bebidas con mucho azúcar y refrescos con más de 15 miligramos de cafeína por 100 mililitros.
El texto en tramitación encuentra su justificación en unos datos que indican que en 2023 un 15,9% de los escolares de seis a nueve años tenían obesidad, en tanto que otro 20,2% presentaba sobrepeso, como refleja para el conjunto de España el Estudio Aladino 2023, en el que participó la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan). En el caso de Galicia, la última radiografía de la Aesan y el Instituto de Salud Carlos III —que sondeó la situación entre la población de dos a 17 años en 2020— apunta que un 28,4% tiene exceso de peso.
Ante este panorama, el proyecto de real decreto para el fomento de una alimentación saludable y sostenible en centros educativos recoge una apuesta por la dieta mediterránea y, más concretamente, por la ingesta de "frutas, verduras, legumbres, cereales integrales, frutos secos y aceite de oliva", combinada con "un consumo moderado de productos de origen animal". En la exposición de motivos, el ministerio incide en que esta es la vía "más beneficiosa" para prevenir enfermedades y para fomentar un estilo de vida saludable.
Pese a que hace años que se incide en la idoneidad de la dieta mediterránea, un informe publicado el pasado martes por la Aesan refleja datos preocupantes como que el 29,1% de los centros escolares españoles sirven "tres o más raciones semanales de fritura", cuando la recomendación es no exceder las dos. También invita a la reflexión el hecho de que el 7% no ofrece "nunca" pescado.
El pescado, en la diana
Y son precisamente las pautas que el ministerio que dirige Pablo Bustinduy fija con respecto al consumo de frutos del mar las que han soliviantado al sector.
Y es que el proyecto de real decreto prevé que entre los segundos platos los niños y jóvenes consuman "de una a tres raciones por semana" de pescado. El departamento que pilota el representante de Sumar apuesta en mayor medida por los platos que tengan como base "la proteína de origen vegetal", pues en este caso fija "de una a cinco raciones por semana".
Tras presentar alegaciones sin éxito, las patronales Conxemar, Arvi, Apromar, Cepesca, Fedepesca, Interfish-España, Aecoc, OPPs Cantábrico y la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores han hecho público su descontento y recuerdan que la Aesan fija "un mínimo de tres raciones de pescado por semana".
Consumo no puede limitar la ingesta de pescado por debajo de lo que recomienda la Aesan"
"Nos parece un grave error y, además, completamente incoherente e incongruente con las recomendaciones de la Aesan, de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria y la OMS. Están más que demostradas todas las propiedades nutricionales y beneficios para la salud que tiene el pescado", defiende Javier Garat, el secretario general de la Confederación Española de Pesca (Cepesca).
Convencido de que es en la niñez cuando "más se necesitan los aportes de vitaminas, minerales, ácidos grasos omega-3 y las inyecciones de serotonina —que produce felicidad— que proporcionan pescados y mariscos", el gaditano denuncia que se está "desincentivando" su ingesta. "Parece que aquí hay algo más aparte de la salud o de la educación y que está relacionado con la ideología. Es un grave error", advierte este experto en Derecho, que incide en que el ministerio "no puede limitar el consumo en los centros educativos por debajo de lo que recomienda" la Aesan, que, curiosamente, depende del propio Consumo.
El colectivo también ve un sinsentido esta apuesta de una parte de la coalición de Gobierno cuando el Ministerio de Pesca, pilotado por el socialista Luis Planas, "está invirtiendo en la promoción del consumo de pescado y marisco, que ha caído más de un 34% en solo unos años".
Regular el consumo de especies con contenido de mercurio
Al frente de la Sociedade Galega de Endocrinoloxía, Nutrición e Metabolismo (SGENM), el doctor Alfonso Vidal Casariego explica que, como fuente "esencial de proteínas y ácidos grasos omega-3, el consumo de pescado contribuye al desarrollo cognitivo en la infancia". Este experto del servicio de Endocrinología y Nutrición del Chuac señala que "la frecuencia óptima" para lograr "beneficios para la salud parece ser de dos a cuatro porciones por semana", una cantidad que "se asocia con una reducción significativa del riesgo de padecer diversas enfermedades, incluyendo las cardiovasculares y el deterioro cognitivo".
El decreto establece entre los requisitos que "deberán evitarse las especies de pescado con alto contenido en mercurio", apuntando al pez espada, el atún rojo, el lucio y variedades de tiburón como el marrajo, la tintorera, la pintarroja, el cazón o las mielgas. El doctor Vidal ve esta medida "prudente y alineada" con las pautas de la Aesan y señala que "los niños son más vulnerables a la acumulación de mercurio, que puede afectar al desarrollo neurológico". A su juicio, toca fomentar especies con menor contenido en metales pesados, "como la merluza, el bacalao, la lubina o el salmón".
El pescado es fuente de proteínas y omega-3. Ayuda al desarrollo cognitivo"
Crítico con el hecho de que en el decreto no se fijen restricciones de este tipo para ningún otro alimentos, el secretario general de Cepesca lamenta que no se tenga en cuenta que las especies cuestionadas "tienen un altísimo contenido en selenio, que hace el efecto antagonista del mercurio". "Los japoneses son los que tienen mayor esperanza de vida y comen kilos de esas especies al año. Deberían estar todos fatal, ¿no?", concluye.
"Preferencia" para conejo y ave al servir carne
El proyecto de real decreto establece entre los criterios nutricionales que han de regir los menús escolares que deberán primarse "los alimentos frescos, de temporada o de canales cortos de distribución como hortalizas, legumbres, cereales —preferiblemente integrales—, frutas, frutos secos y aceite de oliva" y un consumo de proteínas de origen animal "como pescado, huevos, lácteos y carne, preferentemente de ave y conejo".
- Solo agua: Además de limitar a una ración semanal las frituras y a una al mes las pizzas, croquetas y el resto de precocinados, se fija el agua "como única bebida".
- Fichar a nutricionistas: La programación de los menús en los comedores deberá ser supervisada por dietistas nutricionistas titulados.
- Primeros platos: Una o dos raciones de hortalizas; otro tanto de legumbres, y una de arroz y pasta a la semana.
- Segundos platos: De una a tres raciones de pescado por semana; una a dos de huevos y un tope de tres de carne. La roja solo se podrá comer una vez a la semana y la procesada se limita a una vez al mes. En cambio, se podrán tomar de una a cinco raciones de platos basados en proteína vegetal a la semana, que se generalizarán como segundos en los comedores con oferta para vegetarianos.
- El 45% de las raciones de fruta y hortalizas que serán de temporada. Además, un 5% del coste de compra de los alimentos ofertados deberá ser de producción ecológica. El ministerio prevé que "al menos dos platos principales de comida al mes" han de tener este sello. Los centros tendrán dos años para activar estas dos medidas. El resto del decreto entrará en vigor 12 meses tras su publicación en el Boletín Oficial del Estado.