El comité de empresa de FCC, concesionaria del servicio de recogida de basura y limpieza viaria en Vigo, prevé convocar una huelga indefinida a partir del 13 de julio en respuesta a la intención de la dirección de aplicar "recortes" en derechos sociales y a su "inmovilismo" en la negociación del convenio.
Rufino Santalices, presidente del comité, que integran CIG, USO y CC OO, ha explicado este martes en rueda de prensa que las negociaciones comenzaron el 5 de mayo y desde entonces se han celebrado siete reuniones sin que haya habido avances, motivo por el cual los trabajadores son partidarios de ir a la huelga.
Con todo, la representación sindical convocará una nueva asamblea el próximo lunes para que la totalidad del personal, alrededor de 600 empleados, ratifiquen la convocatoria de la huelga, que comenzaría a las 6.00 horas del viernes 13 de julio.
El comité destaca que las principales trabas para llegar a un acuerdo sobre un nuevo convenio son la duración del mismo, pues la dirección quiere dos años y los sindicatos, uno; y la actualización de los salarios, de un 1 % frente a más del 2 % que piden los representantes de los trabajadores.
Censuran la pretensión de la dirección de ajustar el seguro de vida y la ayuda familiar por personas con discapacidad a cargo al tiempo trabajado por el personal de fin de semana
Además, denuncian desde la parte sindical que la empresa plantea su revisión salarial a costa de congelar la antigüedad, retirar los complementos de incapacidad temporal y restringir a parte de la plantilla las mejoras sociales de las que goza el resto.
Adicionalmente, censuran la pretensión de la dirección de ajustar el seguro de vida y la ayuda familiar por personas con discapacidad a cargo al tiempo trabajado por el personal de fin de semana.
El comité de empresa advierte de que no van a dar "ni un paso atrás" en sus reivindicaciones, máxime cuando el pasado abril se incrementó "considerablemente" el canon económico que el Ayuntamiento de Vigo le paga a la compañía.
Y se excusa ante la ciudadanía por las molestias que la huelga les pueda causar, pero que no tienen "más remedio que convocarla".