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De acuerdo con datos publicados por el Ministerio de Sanidad, Galicia tiene la tasa más alta de sobrepeso en el país con un 43,5% de la población, y ocupa el segundo puesto en cuanto a obesidad con 39,3%, superado por Asturias.
En específico la obesidad infantil se ha triplicado en la comunidad gallega desde 1979, según los registros del Programa Xermola de la Xunta de Galicia, cada 3 niños entre los 6 y los 15 años presenta índices de masa corporal compatibles con sobrepeso u obesidad.
Las cifras de obesidad en Galicia son históricas, de un 5 % en 1979 a un 43,5% en la actualidad. Pero no fue hasta el 2016 que pasó a convertirse en la segunda comunidad autónoma con mayores tasas de sobrepeso, y obesidad entre la población adulta española.
Las enfermedades relacionadas con el sobrepeso y obesidad son en primer orden las cardiovasculares, que se constituyen en la primera causa de muerte. Sin embargo, especialistas médicos añaden que las primeras repercusiones son psicológicas, porque quienes padecen exceso de peso terminan afectados en su imagen y autoestima.
El sobrepeso añade factores de riesgos que derivan en: diabetes, apnea del sueño, ácido úrico, problemas articulares, así como circulatorios, y de hipertensión. Precisamente la hipertensión arterial es de las más riesgosas por ser considera “la muerte silenciosa”, debido a que mayormente las personas se sienten sanas y libres de síntomas, razón por la cual este padecimiento puede terminar en ataques al corazón o accidente cerebrovascular (trombosis o derrame cerebral).
Especialistas de la Unidad de Gastroenteroloxía e Nutrición en el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago, señalan que la obesidad se debe al abandono de las dietas tradicionales como la atlántica y la mediterránea, que en la actualidad son sustituidas por alimentos procesados y bebidas azucaradas que se encuentran frecuentemente en casa y en el entorno educativo.
Es por ello, que lo más recomendable es retomar una dieta balanceada donde primen los alimentos hervidos, al horno o a la plancha, cocidos en un sartén antiadherente que incluya thermospot en su punto central, con el que podría alcanzar hasta los 180ºC, para así llegar rápidamente a la base y a los alimentos sin requerir el uso de aceites. Al reducir la ingesta de aceites se previene el aumento del colesterol, triglicéridos y el porcentaje de grasa corporal.
Asimismo, la OMS advierte que realizar un mínimo de actividad física regular en adultos reduce el riesgo de hipertensión, accidentes cerebrovasculares, diabetes, cáncer de mama y de colón. Además de resultar determinante en el gasto energético para el equilibrio calórico y el control de peso.
El 25 % de la población en España es obesa o tiene problemas de sobrepeso, lo que ubica a nuestro país en el segundo de Europa, por detrás del Reino Unido, con más casos de la considerada “pandemia del siglo XXI”.
