El manchego saltó al campo el los últimos minutos, recibiendo una atronadora ovación por parte de la afición coruñesa. El Deportivo de la Coruña se jugaba la vida contra el FC Barcelona en un partido en el que una de las grandes noticias fue la despedida de Andrés Iniesta por parte del estadio de Riazor.
Corría el minuto 87 y el público del Depor se iba a llevar una gran alegría. Nada menos que Andrés Iniesta saltaba al terreno de juego, todo ello a pesar de haber tenido alguna molestia física durante la semana. El manchego no quería forzar para llegar en plena forma al clásico del próximo fin de semana, en el cual el Barça es favorito en William Hill para llevarse el triunfo por encima del Real Madrid.
Iniesta no quería arriesgar, pero tampoco pretendía marcharse de Riazor sin hacer acto de presencia. En gran parte por el resultado, el capitán estuvo calentando toda la segunda parte y una vez el encuentro estaba resuelto, Ernesto Valverde le brindó la oportunidad a Andrés de despedirse de uno de los estadios con mayor historia en este país.
El público dejó a un lado su frustración para ovacionar a un futbolista que entre otras cosas hizo posible que España sea campeona del mundo en este deporte. La acogida al de Fuentealbilla fue tan atronadora que cualquiera pensaría que Iniesta tuvo pasado deportivista.
Recordemos que, salvo un extraño caso, el manchego jugó ayer sus últimos minutos en Riazor y el público quiso agradecerle lo buen futbolista y persona que es. El pasado viernes el 8 azulgrana ofreció una rueda de prensa donde anunció su retirada del Barça, poniendo así rumbo a China, donde jugará sus últimas temporadas de profesional antes de retirarse.
Y es que, otra cosa no, pero Iniesta es querido en cualquier campo del país tanto por su fútbol como por su honestidad y humildad a la hora de hablar y actuar durante toda su carrera deportiva. No es extraño para él que un campo entero se ponga en pie tanto para recibirle como para despedirle, y menos lo será una vez haya oficializado su marcha.
A partir de ahora, al azulgrana solo le quedan dos estadios donde despedirse. El primero, y más importante, será el Camp Nou, su casa. Allí aún podrá jugar tres partidos destacando el que les enfrentará al Real Madrid en el último clásico que el de Fuentealbilla podrá disputar. El segundo es el Ciudad de Valencia en la penúltima jornada de LaLiga Santander, encuentro en el que ninguno de los dos equipos se jugará más que la dignidad y el honor.
Por esta razón, Riazor y, más concretamente, los aficionados del Deportivo de la Coruña podrán estar orgullosos de haberse despedido de un futbolista único tanto en España como en el mundo. La suerte de que justamente fuera el viernes cuando anunciara su marcha del club blaugrana ha sonreído a una afición que apenas ha podido contar con alegría alguna en una campaña complicada para todos en Coruña. Gesto que engrandece aún más al público de Riazor.
Fotos: 'Comenzamos a liga 2012-2013 de volta na primeira' by José Luis Cernadas Iglesias (CC BY 2.0)
Iniesta by iniestazo (CC BY-ND 2.0)
