SUELE OCURRIR. En Justicia acostumbra a ser mayor el ruido que las nueces, lo cual no equivale a eficacia, pero no siempre es eludible. Es el caso de casi todos los macroprocesos que se desenredan en Lugo: acaba siendo bastante más denso el humo que la llamarada. Demasiado rebumbio inicial, bajo la fanfarria de todos al 'paredón'; excesivo relax en la instrucción con desganada modorra, y final impreciso, diluido en agua de borrajas. Cierto es que al principio se ve todo diferente a cómo concluye, una vez dirimidos todos los vaivenes procesales, pero en cualquier caso se deduce que podría hilarse más fino, con mayor discreción, en vez de montar espectáculos innecesarios, muy desagradables, más para los directamente afectados por la exhibición policial y judicial, atizando el mayor ruido mediático, que no es sinónimo de firmeza y mucho menos de seriedad y rigor. La operación Carioca relacionada con la prostitución arrancó ya en 2008 y fue sin duda de las más aparatosas por salpicar a miembros de la Guardia Civil. Conclusión, que pudieron leer en este periódico: la Fiscalía pide el archivo precisamente de la pieza que implica a los agentes del orden.
